Semanario Contraseña

La clave de la información

Llega Campa Lastra a apagar fuegos en Hermosillo

Recién nombrado comisario de Seguridad Pública en la capital del estado, convulsionada por la escalada de violencia generada por grupos del crimen organizado que se pelean Sonora, el jefe policiaco nativo de San Luis Río Colorado advierte que nadie se puede meter con la seguridad de los ciudadanos sin sufrir las consecuencias.

Humberto Melgoza Vega

HERMOSILLO.- En medio de una de las peores crisis de inseguridad que han azotado en Sonora, particularmente en la capital del estado y en la violenta Ciudad Obregón, donde cárteles del narcotráfico se disputan las plazas, el pasado lunes Luis Alberto Campa Lastra rindió protesta como nuevo comisario de Seguridad Pública de Hermosillo, invitado por la polémica alcaldesa “morenista” Célida López Cárdenas.

“No sé si felicitarte o darte mis condolencias”, le dijeron algunos amigos que le hablaron para felicitar al experimentado jefe policiaco luego de que aceptara el reto de pacificar una ciudad donde anda desbocado el crimen organizado, cometiendo delitos de alto impacto.

“Yo no voy andar buscando lo que no se me perdió”, advierte Campa Lastra respecto a cuál será su papel en el combate a la inseguridad que están generando los grupos delictivos, además “el que nada debe, nada teme”.

Negociar con el crimen organizado, aceptar dinero manchado de sangre a cambio de permitirles que se paseen como Pedro por su casa “me parece un acto deleznable”, suelta el comisario de Seguridad Pública.

Viejo conocido, Campa Lastra trae a cuestas la experiencia de haber sido jefe de la Policía en su natal San Luis Río Colorado en la administración del Chito Díaz, de 1997 al 2000, luego de 2007 al 2009 repitió en el cargo durante el gobierno de Rubén Espino y de 2009 a 2013 se desempeñó como el director operativo en la Secretaría de Seguridad Pública cuando Ernesto Munro fue el secretario durante el padrecismo.

En la primera entrevista concedida a un medio de comunicación ahora que regresa a la Jefatura de Policía de Hermosillo, cargo que ya ocupó durante la administración de Dolores del Río de 2004 a 2006, Luis Campa reconoce que la realidad en 2018 es muy diferente, la ciudad ha crecido y con ella sus problemas.

La plática se realiza en el recién estrenado Centro de Inteligencia y Seguridad Municipal (Cisem), un moderno edificio resguardado por agentes que cargan armas largas, ubicado al final del bulevar Colosio, al poniente de la ciudad.

“De lo que yo dejé cuando estuve aquí permanecen algunos cuadros de mando, gente buena, policías de profesión, dedicados, otros ya no están, otros son nuevos, pero la cuestión de la inseguridad en la calle es diferente evidentemente, han pasado muchas cosas en la ciudad, en el país y en el estado, no para bien; el recrudecimiento de la inseguridad en todo el país Sonora no está ajeno a ello, desafortunadamente”, reconoce.

A pesar de los riesgos asumes el reto.

“A lo mejor es presuntuoso decirlo, me lo comentó alguien por ahí `vas a un llamado de la patria´ y creo que sí, en el fondo hay algo de eso, porque me preocupa la ciudad donde mis hijos se están desarrollando, donde están estudiando, aprendiendo a ser ciudadanos de bien, por mi misma familia lo hago.

“También quiero participar en construir una ciudad segura y estoy seguro que podemos hacerlo, si no tuviera la certeza de que podemos hacerlo tal vez no le entraría. Hay mucho por hacer para reconstruir el tejido social, programas transversales en las áreas de oportunidad que requieren los jóvenes, en las áreas de educación, en la convivencia social, en los espacios públicos; el tema de la inseguridad no solo se resuelve con policías y patrullas”.

En lugar de estar agazapado, temeroso porque la inseguridad se salió de control, quejándose, Campa Lastra decidió tomar el toro por cuernos y ser parte activa en la solución del problema.

“Este es un asunto todos, la gente de bien somos más y estoy seguro que entre todos podemos hacer un frente para construir una comunidad segura.

“Es cierto, está enrarecido el clima en materia de inseguridad por hechos muy lamentables, también debemos establecer claramente la labor de la policía preventiva que consiste en hacer presencia, eso es en lo que nos vamos a enfocar, tener vigilancia y una capacidad de respuesta más rápida, que es el principal clamor del ciudadano”.

-¿Vienes con alguna exigencia, algún compromiso, o nomás vienes a administrar el caos?

“Tengo un gran compromiso por la confianza que depositó en mi persona la alcaldesa para encabezar este esfuerzo, mi gran compromiso es con ella y con un Cabildo que votó de manera unánime para otorgarme el cargo y por supuesto, con los hermosillenses de que haré mi mejor esfuerzo para que vivan más tranquilos.

“He recibido todo el apoyo de mi familia, claro, todos, mi familia, mis amigos me dicen `hay que cuidarse´, tienen esa preocupación, para también tienes que cuidarte cuando eres bombero, cuando trabajas en Comisión Federal en las líneas de alta tensión…en todos lados hay riesgos. Evidentemente aquí es de alto riesgo pero sabré cuidarme y tener muy en cuenta que el que nada debe nada teme, que estoy haciendo las cosas bien, de una manera honesta y buscando la tranquilidad de la ciudad y eso nos beneficia a todos”.

Los narcos también son seres pensantes, ¿ellos entenderían un llamado a bajarle a su belicosidad?

“Pues no sé si lo entiendan o no lo entiendan, desafortunadamente no comparto su filosofía, mucho menos sus métodos, porque no hay muchos escrúpulos que exigirles, podríamos encontrarnos gente sin escrúpulos, pero no me interesan sus actividades, no ando buscando lo que no se me perdió, nuestro esfuerzo y nuestra estrategia va a estar enfocada en darle seguridad a las colonias, en combatir los robos, evitar la afectación al patrimonio de la gente”.

Hay jefes policiacos que se hacen ricos en el cargo.

“A mí me parece una actitud nefasta, la sociedad merece todo el respeto y especialmente en el área de la seguridad, es algo fundamental, que nuestros hijos puedan ir tranquilos a la escuela, a practicar su deporte, salir con los amigos…Yo voy a seguir la misma línea de trabajo que tú conoces, enfocado en brindar el servicio y la protección. Con la ciudad y con los ciudadanos nadie se puede meter sin tener consecuencias”.

¿Qué diagnóstico tienes de la guerra por la plaza que traen los grupos del crimen organizado?

“Ahorita no tengo mayores datos, esos temas sí me tocó tratarlos cuando acompañaba al secretario de Seguridad Pública o que lo representaba en alguna mesa de seguridad en donde participan la Marina, Sedena, Gobernación, la Policía Federal, ahí en esas reuniones de alto nivel es donde se comparte esa información y se hacen las estrategias, la policía Municipal participa en algunos operativos como la Base de Operaciones Mixtas (BOM), pero la verdad si se andan peleando el cártel fulano de tal o que algo se perdió me tiene sin pendiente, no son temas que me incumban, que me quiten el sueño, obviamente son asuntos que tenemos que atender porque andamos en la calle y regularmente somos los primeros respondientes, son temas a los que no vamos a estar ajenos porque tenemos que cuidar la ciudad”.

La inseguridad también provocó las bajas en el gobierno del secretario de Seguridad Pública, Adolfo García Morales y del Fiscal General, Rodolfo Montes de Oca, a quienes les pidió su renuncia la gobernadora Claudia Pavlovich luego de haber sido rebasados por la delincuencia.

“Yo desconozco los motivos por los que se han dado esas renuncias, lo que he sabido es que fue por asuntos personales, pero la gente se va y las instituciones prevalecen, nos coordinaremos con los encargados de despacho y con los que posteriormente la gobernadora tenga a bien nombrar, en el ámbito de la seguridad no debe haber colores.

Esperamos que no le eches más gasolina al fuego.

“Estoy seguro que no, no traigo combustible, traigo agua y hay que empezar a apagar fuegos, y a enfriar…así es”. @

Deja un comentario

× Platique con nosotros