Hasta donde tope, el crimen de Abel Murrieta
El Eslabón Perdido
Humberto Melgoza Vega
Sin duda, como dice el periodista Jorge Morales, Abel Murrieta Gutiérrez era un hombre valiente.
En su campaña por la alcaldía de Cajeme como candidato de Movimiento Ciudadano (MC) traía la bandera de rescatar la Ciudad Obregón de las garras del crimen organizado que la tienen ubicada entre las más violentas del país y del mundo.
Traer un discurso frontal en contra de la delincuencia y andar repartiendo propaganda en la calle sin seguridad, luego de haber sido procurador General de Justicia del Estado durante 8 años, donde afectó intereses y mandó a mucha gente peligrosa a la cárcel, era por decir lo menos temerario.
En 2005, como procurador de Justicia en el sexenio del priista Eduardo Bours Castelo, Abel Murrieta fue relacionado en la desaparición del reportero de El Imparcial, Alfredo Jiménez Mota, luego de que éste comenzó a investigar y publicar los nexos del llamado Yaqui Power con los Beltrán Leyva, identificados como “Los Tres Caballeros” en un documento elaborado por la Secretaría de Gobernación.
“No por asustar a nadie pero hay decisiones que se tienen que tomar con mucha rapidez, con mucha decisión… yo voy en serio y voy sin miedo, el que tenga miedo que no venga, voy a recuperar la seguridad de los cajemenses”, aseguraba el candidato Abel Murrieta a todo el que lo entrevistaba.
Como aspirante de Movimiento Ciudadano a la alcaldía de Obregón se había tomado muy en serio el eslogan de campaña “Hasta donde tope”, el cual ha sido enarbolado por su paisano y amigo el candidato a gobernador Ricardo Bours, quien mantiene un discurso agresivo contra la delincuencia y la inseguridad de la que responsabiliza al candidato de Morena, Alfonso Durazo, quien dejó la Secretaría de Seguridad Pública federal para venir a pelear la gubernatura de Sonora.
El artero crimen de Abel Murrieta –ex diputado local, académico universitario y abogado de la familia Le Barón, víctimas de la masacre en Bavispe–, ensombrece aún más el panorama político y de inseguridad en Sonora. Se mancha de rojo sangre el proceso electoral y ahora comienza la repartición de culpas.
En rueda de prensa ofrecida en la Ciudad de México, el dirigente nacional de Movimiento Ciudadano, Clemente Castañeda destacó las virtudes de Abel Murrieta, “un hombre excepcional” que fue ajusticiado porque había advertido que llegando a la presidencia municipal combatiría a la delincuencia organizada.
“Responsabilizamos de la muerte de Abel al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, a la gobernadora del estado, Claudia Pavlovich y al presidente municipal de Ciudad Obregón (Sergio Pablo Mariscal, de Morena)”, soltó Castañeda el video que circula en redes sociales, donde es secundado por el senador Dante Delgado.
Las condolencias y condenas por el alevoso crimen se dieron en cadena, primero la gobernadora Claudia Pavlovich, luego la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, Alfonso Durazo, candidato de Morena y Ernesto Gándara Camou, de la Alianza Va por Sonora entre muchos personajes más de la clase política regional y nacional.
Por la amistad que los unía, una de las más sentidas fue la publicada por Ricardo Bours, candidato a la gubernatura por MC: “QEPD un sonorense valiente como pocos, un sonorense honesto y honrado a carta cabal! QEPD mi amigo y compañero de muchas y grandes batallas! Que en paz descanse Abel Murrieta Gutiérrez, un hombre de Ley! Mónica, Moniquita, Abel y Daniel estén siempre muy orgullosos de su padre! Exijo justicia.”
Pasmados por el impacto de la noticia y en señal de luto, el Instituto Estatal Electoral (IEE) de Sonora decidió cancelar el debate que tenía programado para las 7:00 pm de ayer jueves entre los candidatos a la presidencia municipal de San Luis Río Colorado.
Vamos a ver qué dice sobre este crimen político en la “mañanera” de este viernes el presidente López Obrador.