URGENTE LA PACIFICACIÓN DEL PAÍS: MANUEL ESPINO

Todavía estamos resintiendo los efectos de la guerra declarada por el expresidente Felipe Calderón quien debería estar en la cárcel junto con el que fue su secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna, sentenciado en Estados Unidos a 38 años de cárcel por la protección brindada al Cártel de Sinaloa: Manuel Espino.

Humberto Melgoza Vega

SAN LUIS RÍO COLORADO.- La propuesta para crear la Comisión Especial de Pacificación y Reconciliación Nacional no pasa por dialogar con narcotraficantes, como publicaron algunos medios a nivel nacional, aseveró el diputado federal por Morena, Manuel Espino Barrientos.

Presentado ante la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara de Diputados el 16 de octubre, el documento plantea que “la inseguridad, la violencia y la fractura social, registran niveles tan elevados como alarmantes. Han perturbado nuestra convivencia, afectando de manera profunda la vida de nuestras familias. México sigue siendo víctima de un proceso sutil y perverso de suplantación de sus autoridades, por el poder de grupos criminales que, de manera paulatina, desde hace décadas han disminuido la paz social y vulnerado nuestra gobernabilidad hasta llegar a la situación actual, que todas y todos conocemos y padecemos”.

“No hace falta abundar en ello, ni debatirlo para destacar culpables o estadísticas que demuestran lo que ya sabemos, porque la evidente realidad de inseguridad y violencia que nos acosa, nos acusa de corresponsables a todas y a todos, y nos exige hacer algo para no seguir heredando este problema, de inseguridad y ausencia de paz, generación tras generación. Estamos moralmente obligados a humanizar y pacificar a nuestra querida patria, recurriendo a las palabras antes que a las armas. Es nuestro deber ineludible e impostergable”, sostiene Espino en la exposición de motivos.

Desde principios del siglo que corre y a partir de visiones partidarias e ideológicas diversas, el gobierno de la república ha procurado pacificar a México. Tan loable propósito no se ha logrado de manera satisfactoria, prevalece el desgaste y el estado calamitoso del tejido social que se agudizó en forma dramática desde que el presidente Felipe Calderón Hinojosa, por interés personal de legitimidad, optó de manera temeraria por declarar la guerra al narcotráfico, destaca.

“Iniciar aquella confrontación contra los grupos criminales fue fácil, lo difícil ha sido terminarla, aun cuando el pueblo tenga miedo, hambre de paz y deseo de auto-respeto para una vida digna. Ni siquiera los comportamientos más inhumanos del crimen organizado o las formas más descaradas de la corrupción sistemática generaron repudio unánime a esa estrategia fallida, sino más bien adaptación y, en la mayoría de los casos, resignación o impotencia”, subraya.

El grave error de ese conflicto absurdo detonó una escalada de violencia que no hemos logrado revertir del todo y que, según el INEGI, en lo que va del siglo XXI, ya ha costado el sacrificio de más de 530,000 vidas humanas, una cantidad indeterminada de personas desaparecidas, de víctimas del reclutamiento forzado a grupos criminales, de comunidades desplazadas, desintegración familiar, desconfianza en las instituciones e incuantificables daños económicos, sociales, morales, psicológicos y patrimoniales a nuestra población.

“En tal propósito, es preciso que fomentemos valores humanos, como la comprensión, la tolerancia y la solidaridad, en nuestras familias y comunidades, en las instituciones y órdenes de gobierno, organizaciones sociales y entre quienes generan violencia. Que de manera destacada recurramos al diálogo, porque sin este no hay acceso a la paz”.

Con la llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia, el gobierno tiene claro que no pretende reeditar la guerra declarada por el ex presidente Calderón, pero tampoco la de abrazos, no balazos, aplicada durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador que dejó 199 mil homicidios con violencia.

“Guerra definitivamente no, esa la inició Felipe Calderón y todavía hoy en día estamos viendo las consecuencias; con el presidente López Obrador avanzó de una manera muy importante, cualquier proceso de pacificación en un país inicia por parar el conflicto entre el Estado y los grupos criminales, pero falta mucho por hacer, falta inhibir, desactivar el conflicto entre grupos criminales que en este momento está siendo lacerante para los mexicanos”, manifiesta en entrevista con Semanario CONTRASEÑA.

“Revertir la inseguridad y la violencia crónica que han conflictuado al país y oprimido al pueblo, fue prioridad del presidente Andrés Manuel López Obrador durante su sexenio. El ex mandatario entendió que la paz es producto de la justicia y que, para ser fuerte, el gobierno no tiene que ser violento. Tuvo la claridad de que, aun cuando en ocasiones es necesario usar la fuerza legítima del Estado, recurrir a las armas para combatir el crimen, además de generar círculos de violencia y riesgo para nuestro régimen democrático, implica derramamiento de sangre.

“Desde esa conciencia comenzó por detener el grotesco e irresponsable conflicto bélico que, en nombre de la paz y de la seguridad, por decisión presidencial inició en diciembre del 2006 entre las Fuerzas del Estado y los grupos criminales, misma que al fracasar derivó en pactos con grupos criminales, por conducto del entonces secretario de Seguridad Pública Genaro García Luna. Ese no puede ser el camino a seguir para pacificar el país”, plantea Manuel Espino.

“No le hagas caso a todo lo que publican los pinches periódicos, tú eres periodista, y menos a El Universal, yo no estoy proponiendo dialogar con grupos del crimen organizado, eso no es lo correcto, con ellos no se negocia, se necesita generar una dinámica para que se desactiven y eso contribuya con la pacificación”, señala.

Dice que hay miles de personas que participan en la cadena del narcotráfico en contra de su voluntad y que podrían colaborar con el gobierno, recibir protección y aportar información que sea útil para neutralizar algunas acciones de los grupos criminales.

“Quienes ya participan ahí que estén dispuestos a dejar la actividad criminal y cooperar con información, ayudarle al Estado mexicano a saber cómo operan, dónde operan, quiénes dirigen operaciones, qué planes tienen de expansión, de producción de drogas, de comercialización de las mismas…”, indica.

         “La propuesta de crear una Comisión de Pacificación está muy lejos de pretender un proceso de diálogo con los grupos criminales, eso es un invento de El Universal, un periódico amarillista, mentiroso, no podemos hacerle caso a una pendejada de esas, hombre.

“El tema de la violencia y la inseguridad es muy serio, tú vives en una comunidad que padece de una manera destacada en el país la ausencia de paz, a los grupos criminales hay que combatirlos, hay que desarticularlos”, sostiene.

“Lo digo en el documento que en las últimas décadas ha ido creciendo la influencia del crimen organizado en acaparamiento de poder político, hay gobiernos locales coludidos con el crimen organizado como también hay medios de comunicación, hay periodistas que en lugar de ayudar, estorban, desinformando…”, afirma.

Tampoco vamos a avanzar mucho si las autoridades encargadas de combatirlos se asocian con ellos.

“Pero por supuesto, por eso yo celebro que haya salido la sentencia contra Genaro García Luna, que fue un gran impulsor de la relación del crimen organizado con el gobierno de la República de Felipe Calderón y que además indujo a muchas autoridades policiales estatales, municipales y federales a sumarse a esa lógica de complicidad criminal, eso hay que pararlo”, enfatiza.

“También el documento lo dice, se reconoce que ha habido autoridades en materia de seguridad que en lugar de hacer su tarea bien terminan en brazos de los criminales”, apunta.

  Respecto a la sentencia de 38 años dictada contra García Luna dice que “desearía ver a Felipe Calderón en la cárcel, él dice que no conocía la parte oscura de Genaro García Luna, pues qué pendejo, ¿verdad? Yo creo que sí lo sabía, pero lo toleraba”.

“Yo voy a seguir con la idea de que esta Comisión se autorice, espero que en los próximos días o semanas eso se resuelva favorablemente, porque hay un gran esfuerzo de la presidenta de México para la pacificación del país, lo expresa en su Plan Nacional de Seguridad y ese esfuerzo hay que acompañarlo también desde el Legislativo…”, concluye. @