Mandan fuerza pública a plantón de la calle 3era

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Humberto Melgoza

Ayer, cuando todos creíamos que el conflicto de la calle 3era había llegado a su fin, luego que el alcalde se presentó ante los manifestantes que mantienen un plantón desde hace 10 días y les dijo que la vialidad siempre no se cerraría al tráfico vehicular, las felicitaciones no se hicieron esperar.

Pero este lunes, para asegurar que no se les impidiera reanudar con los trabajos, se está preparando el terreno para poner la plancha de concreto hidráulico, los trabajadores de Obras Públicas y algunos funcionarios del 26 Ayuntamiento llegaron escoltados por la fuerza pública.

Una veintena de agentes tanto de la Policía Municipal, como de la Policía Estatal, que incluyó la utilización de un vehículo antimotines, coparon el plantón entre las calles Juárez e Hidalgo, incluso con un trascabo movieron una de las racas con las que los manifestantes tenían cerrado el paso por lo que instalaron una casa de campaña también por el lado de la avenida Juárez.

Alejandra González Navarro, una de las manifestantes, señaló que el alcalde Leonardo Guillén se comprometió a formar unas mesas de trabajo donde se revisarían las adecuaciones al proyecto “y mientras esto no se nos cumpla aquí vamos a seguir instalados”.

Apuntó que el compromiso del alcalde era que habría una circulación vehicular ininterrumpida, desde la avenida Obregón hasta la Hidalgo, con cajones de estacionamiento, lo que fue interpretado como un acto de buena fe del alcalde el cual fue ampliamente celebrado en las redes sociales.

Sin embargo, esta mañana que llegaron algunos funcionarios del 26 Ayuntamiento, el secretario Martín Ortega, el director de Obras Públicas, Joel Reina y la directora de Planeación, Lizbeth Gardner, quienes los invitaron a retirarse del plantón, sin mostrarles ningún documento en donde se indiquen las nuevas especificaciones del proyecto.

Presente en el plantón, la regidora Karina Silva resaltó que un funcionario de Obras Públicas le dijo que no tenían instrucciones de modificar el proyecto original, que sí había circulación vehicular, con el estacionamiento en el centro de la calle y tomas de drenaje para la instalación de los kioscos comerciales.

El caso es que el conflicto sigue, ahora con el ingrediente adicional de la presencia en las inmediaciones de agentes de policía, lo cual fue considerado como un intento de “intimidación” por parte de los manifestantes.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]