El Eslabón Perdido

 

Humberto Melgoza Vega

 

Parece que no, pero las elecciones internas en el Partido Acción Nacional, el vapuleado PAN, siempre llaman la atención más allá de su propia militancia, al menos entre la clase política y politizada, el llamado círculo rojo, donde entran líderes de opinión y gente con presencia activa en la comunidad.

Este domingo, el PAN entrará en actividad en Sonora cuando se realice la renovación de algunos de sus comités directivos municipales, entre ellos el de San Luis Río Colorado.

Aquí, además de elegir al que será el nuevo presidente del CDM, en la asamblea la militancia panista votará también por candidatos a consejeros estatales y nacionales.

Lo interesante de la votación panista del domingo es que regresarán al formato de asamblea, con un orden del día que constará de 18 puntos y que incluye la participación de un orador por parte de cada uno de los candidatos, el cual se han guardado con mucho hermetismo los aspirantes Iván Sandoval Gámez y David Castillo Yáñez.

Durante mucho tiempo, la exposición de ideas era lo que le ponía sabor al caldo en las asambleas panistas hasta que se convirtieron en frías votaciones en donde la gente iba desfilando para emitir su voto durante todo el día.

La participación de oradores a favor de uno y otro candidato, además de ir midiendo fuerzas a través del “aplausómetro”,  sirve para terminar de convencer a los indecisos.

Como les decía, en muchos sentidos la asamblea dominical del PAN será la nota del día, por tratarse del partido en el gobierno, con una amplia ascendencia entre la población de San Luis Río Colorado, al grado de convertirlo en bastión partidista desde donde se han atrincherado para escalar posiciones a nivel estatal y federal un grupito de afortunados.

Hay interés por la elección interna de Acción Nacional, porque de ahí se irán perfilando las posibles candidaturas, entre ellas la que más importa que es para la alcaldía, en donde se perfilan para pelearla palmo a palmo entre Everardo López y Lina Acosta.

Al igual que Enrique Reina, Everardo, Lina y Angel Acacio se han abstenido de decantarse abiertamente a favor de ninguno de los candidatos en eras de no “embroncarse” con nadie ya que necesitarán de todos cuando busquen algún puesto de elección popular en el 2018.

De manera oficial y en algunos casos subrepticia, meciendo desde las sombras la cuna, el equipo de Iván Sandoval está siendo apoyado además de su grupo íntimo, su hermano el polémico Héctor Sandoval, Alejandro Arce, Juan Carlos Ramírez, David López y Francisco Gallego, por el flamante magistrado Rubén Espino y su hermano Jesús Espino, y la diputada Lina Acosta Cid, quien aspira a convertirse en cabeza de ese grupo.

Con el ex director del Conalep también anda la familia Palafox, encabezada por el patriarca, Jesús Palafox, el zar de los super frenos, su hijo el Puy, el Chalo, Isidro y Mario Palafox y se supone que también el “Pala” José Inés, para completar todo el clan, además de Yaralín Pantoja, cuñada del Chito Díaz y el joven Paolo Navarro como su coordinador de campaña.

Por el lado del vaquero David Castillo hicieron grupo de nuevo la familia de Santiago Huízar, Mario Guevara, Margarito Castro y Genaro Soto, junto con Martín “El Pillín” Ortega, Carlos Corral Quintero, Jessy Gastélum y el aferrado de Abraham Yáñez.

Detrás de Castillo, además de su compadre el cabezón Leonel Reyes aparece de manera intermitente la influencia de Everardo López Córdova, hasta ahora el mejor perfilado para la alcaldía por el PAN, situación que podría variar dependiendo del resultado del próximo domingo.

Algunos panistas se han de sentir raros ahora que no hubo línea por parte del gobierno, que en su momento impulsó la candidatura de Cristian Lardín, quien finalmente declinó a participar en la contienda. Esta situación ha permitido por ejemplo que la veterana profesora Yolanda Osorio Alvarado ande grabando videos de apoyo a Iván Sandoval,  mientras que su hijo Arturo Alvarado participa en el equipo de David Castillo.

A como se percibe el panorama, la competencia se antoja bastante cerrada, difícil de emitir un pronóstico, por lo que deberemos estar atentos a lo que suceda el Día “D”, cuando se puede inclinar hacia cualquier lado la balanza.