El año de la pandemia
Muchas personas ya quisieran terminara este año debido a la pandemia Covid-19, pero para otras el aislamiento abrió nuevas oportunidades de encontrarse con sí mismos y sus seres queridos. Por otra parte, la violencia generalizada en aumento mantiene una situación que puede generar consecuencias todavía más lúgubres que el mismo mal, pues a diferencia de aquél para éste la vacuna es más difícil.
Juan José Razzo
SAN LUIS RÍO COLORADO.- Con estas letras se hace un resumen de los temas más relevantes que se han generado en el año que está finalizando, pero que seguramente tendrán repercusión en el corto, mediano y largo plazo en la vida de todos los mexicanos, quienes se debaten entre mensajes de esperanza y una visión apocalíptica de dimensiones impredecibles.
COVID-19
Desde enero pasado se discutieron en el gobierno de Baja California las medidas para contener la propagación del Covid-19. Pero, aunque hace frontera con Estados Unidos, y Mexicali colinda con California –el estado con más incidencia del virus en aquel país–, la autoridad de Salud se negó a tomar medidas como la geolocalización y seguimiento de casos, o bien la protección del personal médico mediante turnos bien establecidos.
Tampoco se unificaron protocolos para atender el problema con las autoridades estadunidenses. Ahora el estado ocupa el quinto lugar nacional en fallecimientos por la pandemia.
De acuerdo con el boletín diario del gobierno de Baja California, en dicha entidad se registra un acumulado de 5 mil 173 defunciones y 31 mil 868 casos confirmados por la prueba Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR, por sus siglas en inglés) hasta el 26 de diciembre pasado.
En Sonora, también en dicho resumen se mencionan más de 4 mil muertes de sonorenses por la pandemia, pero en el informe diario del gobierno estatal de esta entidad, se confirman 49 mil 962 casos confirmados y 3 mil 879 defunciones, por lo que la variación en las cifras de acuerdo con quien las informa es otro ingrediente de incertidumbre que viven las familias.
De cualquier manera, la situación sigue crítica, como lo dijo el secretario de Salud de Sonora, Enrique Clausen Iberri, quien al igual que sus colaboradores hace continuos llamados a la comunidad a seguir las medidas preventivas por todos los medios posibles, desde volanteos, perifoneo, televisión, radio y hasta concursos de cortometrajes.
“Porque en estos días, cada que sales a la calle sin necesidad de hacerlo, la probabilidad de que te contagies es, como mínimo, de un 60 por ciento; sigues pensando salir de fiesta o ya estás planeando tu gran festejo de Año Nuevo, lo más probable es que lo que estés organizando no sea una fiesta sino un contagio masivo…y de eso, hay un 60 por ciento de probabilidades que suceda”, expresó.
Por eso, dijo, se están saturando los hospitales y si la gente sigue saliendo de fiesta a buscar al coronavirus, existe 60 por ciento de probabilidad que para el mes de enero no haya camas de hospital, ni respiradores, ni personal de salud suficiente para atender tantos y tantos contagios.
CIERRE FRONTERIZO MEXICO-EU
Motivado por la misma propagación del virus y, precisamente para evitarla, el gobierno de Estados Unidos ordenó cerrar la frontera con México, desde abril, para actividades “no esenciales”, aunque dicho término incluye una serie de situaciones a criterio de los oficiales de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés).
La medida tuvo efectos devastadores para la economía transfronteriza, en particular para el sector turístico y de servicios del lado mexicano, donde se habla del cierre de cientos de microempresas, en particular de restaurantes.
El presidente del Consejo Empresarial para el Desarrollo Económico de San Luis Río Colorado, José Torres Gutiérrez, manifestó que las autoridades y la iniciativa privada deberán aplicar todos sus conocimientos, experiencia y propuestas para enfrentar esta situación sin precedentes recientes, por lo que se requieren acciones innovadoras.
Agregó que eso permitirá iniciar la reactivación económica a la brevedad, algo que toda la gente quiere, pero es necesario primero cuidar la salud, por lo que buscan el equilibrio en esos dos aspectos.
Este es uno de los aspectos más oficiales de los efectos del Covid-19, pero el aislamiento provocado en sí mismo repercute en muchos aspectos, todos relacionados con la vida y economía diarias de millones de residentes fronterizos: Los niños no van a la escuela, las tiendas venden menos o fueron obligadas a cerrar, los cines y casinos clausurados, los restaurantes apenas están abriendo con aforos muy limitados, vuelos y autobuses prohibidos, cero deportes al aire libre, las actividades culturales continúan suspendidas, además de que los confinados obligatoriamente están sufriendo, como el caso particular de las personas de la tercera edad y que laboraban como empacadores en abarrotes y supermercados.
Toda esta situación ha generado cambios sustanciales en la manera en que los seres humanos tenían su existencia, y la mayoría de los expertos manifestaron que estas acciones y medidas preventivas llegaron para quedarse.
Apenas las últimas semanas se habló de una mutación del coronavirus, mediante una nueva cepa surgida en Reino Unido, con la cual el microorganismo busca lo que desde hace millones de años tratar de hacer todo ser vivo: sobrevivir.
Ambientalistas consideran que este fenómeno se debe a lo mal que hemos tratado al planeta, pero también las personas creyentes consideran que es un vaticinio sobre lo que le espera a la Madre Tierra en un futuro todavía no definido.
VIOLENCIA
Las muertes violentas en Sonora y Baja California también han sido un tema crucial durante todo el año 2020, donde, respectivamente, sumaban mil 206 y 2 mil 368 hasta el cierre de noviembre, de acuerdo con el Semáforo Delictivo Nacional.
Entre las causas figuran principalmente las ejecuciones por cuentas del narcotráfico, enfrentamientos armados y las víctimas del fuego cruzado, pero también los casos en que intervienen las fuerzas policiales o armadas, riñas y otras causas menores en la contabilidad.
Otro fenómeno cruel es el feminicidio. En lo que va de 2020 y hasta el 25 de noviembre habían sido asesinadas 2 mil 874 mujeres y niñas en México, de acuerdo con el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF).
Sólo 724 casos se están investigando como feminicidio, lo equivalente a un 26 por ciento, indicó el organismo civil en el marco del 25 de noviembre “Día Internacional para la Erradicación de la Violencia contra las Mujeres”.
Pero entre las víctimas de la violencia también se encuentra un sector no menos importante y que siempre ha parecido invulnerable ante estos hechos: los policías.
En este asunto y hasta el 1 de octubre, el estado de Baja California había registrado 17 casos de policías asesinados, mientras que en 2018 y 2019 se registraron 12 casos en cada año.
Con frecuencia escuchamos cómo la violencia e inseguridad se asientan en nuestros espacios, ¿cuántos ciudadanos no hemos modificado nuestras prácticas más cotidianas por la preocupación de ser víctimas de algún delito? Pero, hoy queremos hablar de quienes se encuentran aún en mayor riesgo, los policías. Son ellos quienes, todos los días, exponen sus vidas para hacer frente a criminales y a todo aquel ciudadano que infrinja las leyes.
De acuerdo con un reporte del Comité Ciudadano de Seguridad Pública de Sonora, en la entidad durante el presente año se han registrado 21 homicidios contra elementos policiales, siendo octubre el de mayor incidencia con cinco casos.
En casi tres años, del 1 de enero de 2018 al 30 de noviembre de 2020, se registran, al menos, mil 355 policías asesinados en México.
De enero a noviembre de este año, un total de 21 policías de todos los niveles fueron abatidos en Sonora en el cumplimiento de su deber. De ellos, 19 eran hombres, una era mujer y uno no fue identificado.
Las víctimas sonorenses fueron tres agentes de la Policía Estatal de Seguridad Pública (PESP) y 18 policías municipales. Y estos hechos se concentraron, principalmente, en municipios que destacan por el alto nivel de violencia que padecen actualmente: Guaymas (6), Cajeme (5), Hermosillo (3), Bácum (1), Caborca (1), San Luis Río Colorado (1), San Pedro de la Cueva (1), Santa Ana (1), Soyopa (1) y Yécora (1).
Es inadmisible que la mayoría de los casos pasen desapercibidos y sólo sean un número más en la sección policiaca de la prensa local. No más policías asesinados, puntualizó el consejo ciudadano.
El Comité Ciudadano de Seguridad Pública de Sonora se solidarizó con las familias de quienes dieron sus vidas en protección de los sonorenses, “memoramos su recuerdo y demandamos acciones categóricas para la resolución de los asesinatos de policías que hasta hoy siguen impunes”.
SAN LUIS RIO COLORADO
Aunque en lo global todos estos temas anteriores afectaron a San Luis Río Colorado, uno de los principales temas a nivel municipal es la eventualidad de una muy posible reelección del alcalde morenista, Santos González Yescas.
Durante todo el año, y se espera que continúe, las redes sociales dan constancia de que cada día sus seguidores destacan los logros alcanzados durante lo que va del trienio, algunos de ellos poco igualados en el pasado, como es la entrega de apoyos económicos a diversos sectores sociales empobrecidos y disminuidos por la pandemia.
Por otra parte, sus detractores, cuestionan cada movimiento, como presagio de una elección constitucional que se avecina y donde los sanluisinos, sonorenses y mexicanos, nos jugamos el futuro del país.
Dadas las circunstancias actuales es muy difícil hacer una prospectiva adecuada, ver hacia el futuro, pero seguramente influirán en mucho las decisiones de las autoridades respecto a las medidas a tomar en la aplicación de la vacuna contra el coronavirus. Seguramente será un punto de inflexión.
Sólo queda esperar lo que se marcará en lo que después llamaremos historia. @