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Nueva amenaza se cierne sobre pescadores

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El hallazgo de tres vaquitas marinas muertas, el anuncio de que ya solo quedan 60 ejemplares de la especie, así como la depredación indiscriminada de la totoaba para sacarle el buche y vendérselo a los chinos en miles de dólares el kilo ha provocado una nueva andanada de presiones internacionales sobre el gobierno mexicano. Este viernes 20 de mayo podrían salir chispas en el foro organizado en el Golfo de Santa Clara.

Humberto Melgoza Vega

SAN LUIS RIO COLORADO.- Lejos de solucionarse, el asunto de la veda de la pesca en el Golfo de Santa Clara como en el puerto de San Felipe tiende a agravarse, ante la presión internacional que están ejerciendo grupos ambientalistas protectores sobre todo de la vaquita marina, especie endémica del Alto Golfo de California.

Luego que el Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita (Cirva) informó que sólo quedaban 60 ejemplares de la vaquita y que para antes de que finalice este sexenio la especie estaría prácticamente extinta, comenzaron a aplicarse medidas urgentes y extraordinarias que podrían impactar en las comunidades pesqueras donde fue decretada la veda.

Una de las medidas que más preocupa a los pescadores organizados es que estos organismos están presionando al gobierno de México para que se suspenda la pesca de manera definitiva, hasta que se logre repoblar la especie, prohibiendo incluso la pesca de curvina, que es la única que hasta ahorita está permitida y cuyas ganancias millonarias son un respiro para la comunidad pesquera.

Durante el foro que se realizará este viernes 20 de mayo en el Golfo de Santa Clara, donde abordarán el tema de las especies en peligro de extinción, la postura de los pescadores organizados será muy clara y contundente en contra de que se cierre la pesca de manera definitiva, sentenció el líder cooperativista Carlos Alberto Tirado Pineda.

Reconoció que el tema vino a complicarse porque en el área de San Felipe se encontraron tres vaquitas marinas muertas, las cuales se habían enredado en las mallas que usan para la pesca, y también por la indiscriminada captura de la totoaba, la cual están depredando traficantes que la comercializan hacia el mercado chino, en donde compran la vejiga natatoria (buche) hasta en 5 mil dólares el kilo.

El foro de este viernes, en el que se contará con autoridades de los tres niveles de gobierno, organismos no gubernamentales y por supuesto el sector pesquero, será definitivo para marcar las directrices que habrán de seguir para conservar las especies en peligro de extinción, como son la vaquita y la totoaba, sin que se afecte a la especie humana.

“Estamos llegando a un punto riesgoso, tanto para los pescadores como para la vaquita, que es una especie única, sobre todo por la última recomendación que está haciendo Cirva al gobierno mexicano, por el censo realizado en donde informan que sólo quedan 60 ejemplares de la vaquita marina”, manifestó Carlos Tirado.

Desde hace un año que el presidente Enrique Peña Nieto decretó la veda en la zona del Alto Golfo por dos años, y ordenó la compensación económica a los involucrados en la cadena productiva, no se ha conseguido parar la pesca furtiva, en la que incurren pescadores fuereños quienes actúan como verdaderos piratas, aprovechando la corrupción en la que incurren las autoridades encargadas de vigilar que se respete el decreto.

“Este año en especial fue la pesca furtiva la que depredó la especie, sobre todo la totoaba, que es una especie protegida porque está en peligro de extinción, y la vaquita marina, que desafortunadamente se enreda en las artes de pesca”, apuntó.

“Creo yo que la vigilancia ha sido rebasada, ahora dicen que van a meter drones y que va a entrar la Gendarmería Federal, esperemos que no sea demasiado tarde”. Carlos Tirado apuntó que dentro del decreto al gobierno le faltó implementar programas adicionales a la veda para que los pobladores tuvieran otras maneras de conseguir el sustento para sus familias.

“Nosotros no compartimos la posibilidad de que se cierre también la pesca de la curvina, que se ha demostrado que es sustentable, hay otros mecanismos que deberían implementar como una mayor vigilancia para evitar que pesquen quienes no tienen permiso, que se coloque un chip a las pangas para tenerlas monitoreadas. La pesca ilegal son quienes están propiciando este desastre”, sostuvo.

Tirado consideró que también es necesario tipificar como delito grave la pesca de especies protegidas porque se ha visto que los traficantes de totoaba, como el que fue detenido con 121 buches a finales de marzo pasado, a los pocos días ya andaba en la calle como si nada.

“Esto genera una inconformidad entre los pescadores que sí respetamos la veda y fomenta la ilegalidad”, comentó.

A raíz de la balacera registrada en Semana Santa, enfrentamiento en el que falleció un agente de la Policía Municipal y el hasta entonces considerado líder de los “narco-bucheros” en Santa Clara, el gobierno municipal a través del Cabildo envió un exhorto a la gobernadora Claudia Pavlovich para que intercediera ante la federación con la finalidad de que reforzaran la vigilancia para evitar tanto la depredación de la totoaba y para evitar que se registren más muertes por la codicia que despierta el valor que le han dado a este producto en el mercado negro.

Casi un mes después, el 28 de abril, el titular de la Comisión de Ecología y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora (Cedes), Luis Carlos Romo Salazar, respondió al regidor Jorge Figueroa que por instrucciones de la gobernadora se habían reunido con el delegado de la Profepa, Jorge Carlos Flores Monge, quien le entregó un informe por escrito el cual le hizo llegar junto con el oficio en donde anunciaban que “en las próximas semanas” entraría la vigilancia de la Gendarmería al Golfo de Santa Clara, cosa que hasta la fecha no ha ocurrido.

“Este nuevo cuerpo armado tiene como función principal evitar la cacería y la pesca ilegal, así como la tala no autorizada, invasiones y el tráfico de fauna protegida. Se nos comentó que la citada Gendarmería Ambiental estará presente de manera permanente en todas las áreas naturales protegidas del país y que el Alto Golfo de California representa una prioridad”, expuso Romo Salazar en el oficio.

En la misma respuesta, el delegado de la Profepa mencionó que “debido al incremento en la demanda asiática de la totoaba y al crecimiento de los grupos delictivos que trafican con la misma, Semar, Conapesca, Conanp y Profepa mantienen el operativo de 24 horas en mar y tierra para inhibir este comercio”.

Flores Monge informó que la dependencia a su cargo mantiene a seis inspectores comisionados en la zona, quienes lograron dos aseguramientos importantes en la última semana: el primero fue de 48 kilogramos de totoaba (en filete, hueva y buches), además de distintas artes de pesca prohibidas en una bodega en el Golfo de Santa Clara.

“Cuatro días después, en un operativo marítimo, los inspectores aseguraron un par de redes conocidas como totoaberas en la zona núcleo, la primera de ellas, de 300 metros de longitud, tenía 6 totoabas enmalladas, de las cuales solo una estaba viva y fue liberada en el mismo lugar; la segunda red, de 200 metros de longitud tenía dos totoabas más, también muertas. Los ocho ejemplares fueron enterrados en lugar seguro”.

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Presión internacional

El pasado jueves que se realizó en Ensenada la séptima reunión informativa de Cirvam en la que participaron el titular de la Semarnat, Rafael Pacchiano Alamán, y el gobernador de Baja California, Francisco Vega de la Madrid, se informó que de acuerdo al último censo levantado ya solo quedan 60 vaquitas marinas.

Tras lamentar el reciente hallazgo de tres vaquitas muertas en la zona de San Felipe, Pacchiano reiteró el compromiso del gobierno federal para evitar la extinción del cetáceo, combatiendo además la pesca ilegal de la totoaba así como el tráfico ilegal de especies marinas protegidas y la presencia de grupos de la delincuencia organizada relacionados con esta actividad.

Mientras que en el Golfo la vigilancia sigue siendo marginal, en el área de San Felipe permanece un helicóptero artillado, también vigilan en aviones no tripulados llamados Persuader y Maule, además de seis defenders, dos motos acuáticas, cuatro interceptoras, tres embarcaciones menores, cinco pick-ups y dos unimog.

Con este operativo las autoridades involucradas reportaron los siguientes resultados hasta el 12 de mayo de 2016: Se han inspeccionado 3,278 embarcaciones, 17,133 personas, 6,699 vehículos, 48 instalaciones en tierra y 275 buques. Se capacitaron 1,244 elementos de la SEMAR, 289 de la Defensa Nacional y 234 de otras dependencias. Se pusieron a disposición de las autoridades 122 embarcaciones menores, 77 personas, 20 vehículos, 79 ejemplares de totoaba, 177 buches de la misma especie, 600 artes de pesca y cuatro buques.

Ante el drástico descenso en la población de vaquitas marinas, el pasado lunes la organización ambientalista WWF hizo un llamado al gobierno mexicano para la implementación de cuatro medidas urgentes. “Estamos convencidos de que todavía es posible salvar a la vaquita”, dijo en conferencia de prensa el director de WWF México, Omar Vidal. después de que un estudio del Comité Internacional para la Recuperación de la Vaquita encontró que en diciembre de 2015 quedaban sólo alrededor de 60 de estas marsopas de las 97 que sobrevivían en 2014.

La primera medida propuesta es que el gobierno de México trabaje en conjunto con el de China y Estados Unidos para combatir y erradicar la pesca ilegal y contrabando de totoaba, un pez que también está en peligro de extinción.

“La totoaba se pesca de forma ilegal en México, es transportada a Estados Unidos y luego se trafica en China, donde se le considera un alimento de lujo”, explicó Vidal. “Es por eso que la responsabilidad no recae sólo en México, sino en tres países”.

La pesca ilegal de totoaba es la principal causa de la disminución en la población de la vaquita marina, que queda atrapada en las llamadas redes de enmalle que utilizan los pescadores, resaltó.

“Ellos no quieren matar vaquitas, pero utilizan métodos nocivos”, dijo. Junto a otros expertos ha trabajado en diseñar redes que no pongan en peligro a este cetáceo.

Vidal señaló la importancia de erradicar la pesca ilegal de totoaba para darle una oportunidad a la vaquita marina. En ese sentido, consideró que China juega un papel crucial por ser el origen de la demanda de ese pez.

“Si no detenemos la demanda de la totoaba, veo muy difícil salvar a la vaquita”, manifestó.

La segunda medida plantea el cierre “inmediato e indefinido” de las actividades pesqueras en el hábitat de la vaquita marina (Phocoena sinus) por dos años para evitar su muerte en las redes, y compensar económicamente a los pescadores que se vean afectados por la veda.

La tercera medida es que la vigilancia en el hábitat de este animal se convierta en “prioridad número uno” del gobierno mexicano, que en abril del año pasado decretó una serie de acciones para salvarlo, como establecer un área de 1.2 kilómetros cuadrados como refugio y donde está prohibida cualquier actividad pesquera.

“Pese a estas acciones, continuaron las actividades de pesca en el refugio de la vaquita, así como el uso de redes de enmalle”, añadió Vidal.

La última medida prevé abrir las pesquerías “sólo cuando se demuestre que la vaquita está en camino a la recuperación”. @

*Con información de emeequis.

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