Van por chatarreros, yonqueros y casas de empeño
Desde hace algunas semanas, el gobierno municipal, a través del Cabildo, empezó por pedir que se revisara si los yonqueros cumplen con la reglamentación que les corresponde con la Dirección de Desarrollo Urbano y Ecología para que puedan renovar su licencia de funcionamiento, una acción que también se estará efectuando en los negocios que compran chatarra.
Al respecto, el regidor perredista, Martín Valtierra Meza, indicó que es preciso que los yonqueros cumplan con los requisitos que se les solicitan para la renovación de su licencia de funcionamiento y así evitar la proliferación de estas empresas.
Y es que, afirmó, por la avenida Obregón a simple vista se observa que han proliferado los yonques, aunque en esta administración únicamente se les ha otorgado permiso de funcionamiento a tres nuevos comercios de este giro.
“Nosotros le pedimos al director que acotara la expedición de permisos en zonas determinadas, porque se sigue llenando la Obregón de yonques; la intención es entrar en una etapa de regularización de estos negocios”, explicó.
Entre las regulaciones con las que deben cumplir, indicó, es que no deben tirar aceites en su área porque ello representa una fuente de contaminación, y que ese fue uno de los motivos por los que se pidió al director de Desarrollo Urbano, Jorge Pompa, que dirigiera las verificaciones correspondientes para proceder a aplicar la reglamentación municipal.
Con el fin de transparentar las acciones de ciertos negocios, evitar que proliferen sin control y vigilar que cumplan con la reglamentación establecida por el municipio, Desarrollo Urbano y la Profeco se dirigen, respectivamente, a revisar tanto a las empresas que compran chatarra y a los yonques, como a las casas de empeño que, de alguna manera, contribuyen a que la delincuencia tenga dónde efectuar sus “trueques”
“Son alrededor de 52 yonques, pero es lo que se tiene conocimiento, el mismo funcionario reconoció que de repente aparecen, algunos de ellos compran chatarra también, depende del giro que se maneje, a veces compran refacciones de vehículos que pueden ser desmantelados”, advirtió.
Y es que, mientras solamente se tienen registrados 38 yonques, existen 52, de los que se tienen conocimiento, reiteró, por lo que San Luis Río Colorado cuenta con una especie de “giro negro”, en el que además se afecta a la imagen urbana.
Los cambios de uso de suelo por la avenida Obregón, comentó, son solo para el giro comercial, pero no para negocios de manutención.
“Los tecatos están macizos”
A la par, externó, Cabildo está considerando analizar a las empresas recicladoras que compran chatarra como metal, cobre, aluminio, etcétera.
“Debemos cumplir con esa necesidad como Ayuntamiento, tenemos que legislar la reglamentación necesaria para que las recicladoras no operen de manera impune en la compra de artículos robados, esa es una necesidad urgente en la sociedad”, señaló.
En ese sentido, el edil recordó que si bien la existencia de este tipo de negocios no incentivan directamente el crimen o el robo de cableado, por ejemplo, si reciben material que pudiera ser robado y que inclusive los mismos empleados de esos lugares están conscientes de ello.
Y es que hasta el momento, lo que marca la ley respecto a las empresas recicladoras que compran chatarra es muy ambiguo y hay muchas lagunas en las regulaciones, agregó, por lo que el gobierno tiene que actuar para cubrir todos esos puntos no determinados en la ley.
“Ahí entra la regulación municipal, me preocupa eso, dejas una propiedad sola y al rato la encuentras sin alambre, sin ventanas, sin nada, y ¿a dónde va todo eso?, pues a las recicladoras que compran lo mal-habido, y que incluso tienen servicio de hasta 24 horas, el robo de alambrado y de los mismos vehículos lo roban y los llevan ahí, y es de lo más común”, afirmó.
Inclusive, el regidor mencionó que al visitar una de esas empresas que compran chatarra, confirmó con los empleados que ahí trabajan que efectivamente compran, por ejemplo, el alambre de malla ciclónica a ocho pesos el kilo.
“Los tecatos están macizos, se dan maña para cargar todo eso y desmantelan cercos completos de lotes, van y roban al ciudadano y ellos mismos lo reconocen, lo dicen abiertamente, lo saben, pero no tenemos restricción ni ley, ni reglamentación adecuada”, expresó.
La propuesta, adelantó, será presentada en próximas fechas a la coordinación de la Comisión de Reglamentación y Gobierno en Cabildo para impulsar esas medidas y evitar la delincuencia en la medida de lo posible.
Además, se abordará el tema de la regulación que deben seguir los propietarios de las casas de empeño de esta ciudad, que también proliferan, comentó el edil del sol azteca.
Advertencia a las casas de empeño
Por otra parte, la oficina de Enlace de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en San Luis lanzó una advertencia a las casas de empeño para que cumplan con su reglamentación y respeten los derechos del consumidor.
De acuerdo al titular de la Profeco en San Luis, David Castillo Yáñez, las sanciones a dichos establecimientos que no cumplan con su contrato de adhesión se traducirán en multas que ascienden hasta los 20 mil pesos.
Asimismo, anunció que los inspectores del departamento de Verificación y Vigilancia estarán realizando constantes inspecciones a este sector, cuya actividad se incrementa durante la temporada de verano.
Los proveedores, precisó, deben transparentar sus operaciones, en las que se deben hacer públicos todos los anuncios a través de los cuales se informe sobre el porcentaje del préstamo conforme a los avalúos.
La empresa también debe informar al consumidor de la tasa de interés por año que se cobre sobre los saldos insolutos así como las condiciones de venta, entre otras especificaciones, como las que se citan en la Norma Oficial Mexicana No. 179.
Las casas de empeño también deberán exhibir el contrato de adhesión, así como mantener calibradas sus básculas, agregó el titular de la Profeco. @