Semanario Contraseña

La clave de la información

A regar el tepache

El Eslabón Perdido

 

Humberto Melgoza Vega

 

La política en México se divide antes y después del gasolinazo de 2017.

Luego de esta medida tan impopular, que representó un drástico aumento a las gasolinas y diesel, iniciativa de Peña Nieto avalada por los diputados del PRI y por unos “ingenuos” legisladores del PAN, la gente salió a las calles a protestar y ahorita trae atravesados a todo lo que huela a partidos y a los políticos de siempre.

Esta nueva realidad la leyó muy bien el empresario panista y presidente del Club de Beisbol Algodoneros de San Luis, Francisco Ochoa Montaño al momento de decidir buscar la candidatura a la presidencia municipal en los comicios de 2018, que se antojan harto competidos porque además habrá el cambio en la Presidencia de la República, donde el PRI de Peña amenaza con desplomarse al tercer lugar, como en los tiempos de Roberto Madrazo.

La aparición de Paco Ochoa en el panorama pre-electoral no estaba considerada por el panismo local, estatal, ni menos nacional y de entrada viene a fracturar el grupo que se había formado en torno, quizás no a Lina Acosta pero al menos sí a favor de Iván Sandoval, quien pretendió la dirigencia municipal del blanquiazul y se quedaron a seis votos de lograrlo.

También, le pega una destanteada al diputado federal Everardo López, si acaso el más perfilado para esa posición, sobre todo por su cercana relación con el presidente del Comité Directivo Estatal, David Galván Cázares, y del segundo de a bordo a nivel nacional, Damián Zepeda Vidales, aunque vulnerable por los recientes  señalamientos en su contra.

De alguna manera, hay personas que pretenden hacer creer que, con el destape de Paco Ochoa la diputada Lina Acosta se va a bajar de la contienda, para enfocar sus baterías por la diputación federal.

Pero eso no es cierto. Lina Acosta anda más activa que nunca, debatiendo los principales temas a nivel estatal, nacional y local, a la espera de que el Comité Ejecutivo Nacional dicte las reglas para el proceso electoral de 2018, en donde podría verse favorecida por la ley de equidad de género.

Mientras esto no suceda, mal haría la diputada en bajarse de una contienda en la que es muy competitiva.

La decisión de Paco Ochoa también les mueve el tapete a Iván Sandoval y a Paolo Navarro, dos cuadros novedosos del PAN que tienen aspiraciones políticas y sueñan en grande, de la alcaldía y la diputación local para abajo.

Aunque primero, para siquiera estar en condiciones de competir, el ingeniero que se dedica al ramo electricista deberá conquistar a la militancia panista, a la que ha tenido muy abandonada por años, dedicado a su actividad particular, pero que demanda y requiere que la tomen en cuenta y la apapachen.

En un PAN donde ya se habla de traiciones en los grupos de chats privados y de manera incipiente en la redes sociales, nadie puede descartar la irrupción de la nueva camada del PRI, cuadros con capacidad y carisma como el subsecretario de Gobierno, Héctor Virgilio Leyva y el director general del Conalep, Carlos Silva Toledo, como para competir en igualdad de circunstancias ante sus adversarios de Acción Nacional.

Las siguientes elecciones se antojan además de muy competidas inéditas, en un panorama regido en buena medida por las redes sociales, donde competirán con mayores posibilidades de éxito quienes interpreten los nuevos tiempos de la política en nuestro país.

Deja un comentario

× Platique con nosotros