Cero abrazos, combate al CO va en serio
En esta semana, agentes de la Policía Municipal de San Luis y elementos de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano realizaron sendas detenciones y el aseguramiento de armas de alto poder, incluidas un fusil Barret y dos lanzagranadas, primero en el Golfo de Santa Clara y después en plena mancha urbana de esta frontera. La pelota ahora está en la cancha de la Fiscalía General de la República (FGR).
Humberto Melgoza Vega
SAN LUIS RÍO COLORADO.- Al menos tres eventos de alto impacto ocurridos en las últimas semanas indicarían que el combate al crimen organizado por parte de las corporaciones policiacas y militares asentadas en San Luis Río Colorado, Sonora, va en serio.
A pesar de que en los corrillos del bajo mundo y en las redes socio-digitales se especula respecto a un supuesto pacto de impunidad, los recientes acontecimientos echan por tierra tal aseveración o al menos la ponen en tela de duda.
Mientras que la política del presidente de la República manda señales equivocadas respecto al trato que se le debe dar a la delincuencia organizada, ya que “también son seres humanos”, el eslogan de “abrazos, no balazos” no siempre aplica para las fuerzas del orden que son celosos de su deber y hacen valer su autoridad.
El evento más reciente se registró la tarde del pasado martes, cuando elementos de la Policía Municipal persiguieron y detuvieron a un grupo armado en la gasolinera de la avenida Libertad y 26, a quienes se les decomisaron armas largas, droga y chalecos anti-balas.
De manera extraoficial, al grupo armado se le relacionó con el cártel de la Gente Nueva Salazar, quienes operan en todo Sonora y parte de Chihuahua, ya que entre sus pertenencias se les aseguró una cachucha con las siglas GNS.
Un día antes, en el Golfo de Santa Clara el Ejército Mexicano asestó un importante golpe a la delincuencia organizada con el decomiso de un arsenal y la detención de siete personas, cinco hombres y dos mujeres, a quienes identificaron como presuntos miembros de “La Chapiza”
A los detenidos, entre ellos un sujeto identificado como “El Mono”, supuesto líder de la célula delictiva asentada en el poblado pesquero, se les aseguraron 4 ametralladoras y 4 fusiles de asalto, entre AK-47 “cuerno de chivo” y AR-15, además de un poderoso fusil Barret calibre 50, dos aditamentos lanzagranadas, 2 pistolas, municiones de diferente calibre, material y equipo táctico y 4 vehículos de diferentes marcas.
Para cerrar la pinza, la tarde del 21 de mayo agentes de la Municipal que recibieron el reporte de sus homónimos de Mexicali interceptaron en el ejido Pozas de Arvizu a los tripulantes de una GMC Yukon de modelo reciente, con quienes se liaron a balazos.
El operativo había iniciado en las brechas del poblado Guadalupe Victoria, mejor conocido como Kilómetro 43, en el Valle de Mexicali, donde se detectó a un grupo armado a bordo de dos camionetas, una Tahoe color arena y la Yukon negra.
Tras una persecución y balacera que terminó cuando se embancaron en la orilla de un dren, la policía de Mexicali capturó a los cuatro tripulantes de la Tahoe, entre ellos un menor de 16 años, en posesión de 4 rifles de asalto, cargadores, una granada de fragmentación, cartuchos y chalecos balísticos.
Los de la Yukon alcanzaron a huir hacia territorio sonorense y fueron detectados por los municipales en una llantera de Pozas de Arvizu, donde fueron recibidos a balazos.
Con el apoyo de la Policía Estatal, Ejército y Guardia Nacional se logró la detención de tres sujetos, Jesús Armando de 23 años, Erick de 19 y Javier de 22 mientras que Salvador N, de 32, oriundo de Manuel Doblado, Guanajuato resultó muerto en el enfrentamiento en donde también resultaron heridos dos elementos municipales.
Los detenidos, quienes traían dos “cuernos de chivo”, una AR-15, una pistola 9mm, 3 chalecos tácticos antibalas, 16 cargadores abastecidos y artefactos conocidos como “poncha-llantas”, fueron vinculados a proceso por posesión de armas exclusivas del Ejército y las Fuerzas Armadas, asociación delictuosa y por tentativa de homicidio en perjuicio de siete personas.
Celosos de su deber
Faltaban unos minutos para las 8:00 de la noche del pasado martes cuando los elementos de la Policía Municipal detectaron a los tripulantes de una Suburban blanca modelo 2018, con placas de Arizona, que se desplazaba a exceso de velocidad a la altura de la avenida Oaxaca y calle 24.
Tras marcarles el alto con código y sirena aceleraron la marcha y fue como se desató una persecución por varias calles que terminó en una gasolinera ubicada en la avenida Libertad y 26.
Los tripulantes de una Suburban con las mismas características ya habían sido reportados de andar armados, parando vehículos y realizando revisión a civiles tanto en el valle como la ciudad, por lo que las unidades activaron el Código Rojo de emergencia.
Los presuntos delincuentes fueron rodeados por patrullas de la Policía Municipal, quienes los encañonaron con sus armas largas y los obligaron a bajar del vehículo, en donde a simple vista se observaba que andaban armados.
En el operativo para someterlos participaron también elementos que se encontraban fuera de turno y que llegaron a bordo de sus patrullas vistiendo short y camiseta, como se aprecia en los videos que circularon en las redes sociales y que llamaron la atención de la opinión pública.
Estos elementos se encontraban disputando un partido de futbol en un campo que está cercano a la comandancia, por la avenida Guerrero 34 y 35, y atendieron el Código Rojo en apoyo de sus compañeros.
Tras someterlos, bajo un fuerte dispositivo de seguridad los presuntos delincuentes fueron llevados a la Comandancia de Policía en donde tomaron sus datos, los certificaron clínicamente para inmediatamente turnarlos a la Fiscalía General de la República (FGR) en la avenida Obregón 11 y 12 con cargos por la posesión de armas de uso exclusivo del Ejército y asociación delictuosa.
Los detenidos fueron identificados como Francisco Eduardo C, de 18 años de edad, originario de Nogales, Sonora; Francisco Javier B, de 24, con domicilio en Hermosillo; Christian Miguel C, de 43, oriundo de Guasave, Sinaloa y Luis Gilberto B, de 38, con domicilio en esta frontera.
A los detenidos se les decomisaron 3 armas largas, dos calibre 5.56 y una 7.62, todas con el cargador abastecido con 30 cartuchos, además de 4 armas de fuego cortas, dos calibre 9 mm, una Glock y una Sig Sauer, la marca preferida del extinto capo colombiano Pablo Escobar; un revólver cromado de la marca Smith & Wesson y una escuadra Pietro Beretta, todas con el cargador abastecido.
Además les aseguraron 3 chalecos anti-balas, cinco envoltorios de narcótico y 6 teléfonos celulares.
Un día antes pero en el Golfo de Santa Clara las fuerzas castrenses lograron la detención de una célula delictiva relacionada con la Chapiza equipados con un arsenal.
Fue una denuncia anónima la que alertó sobre la presencia de personas armadas en una casona de dos pisos, en avenida Luis Encinas Johnson y calle Hidalgo, camino al Machorro, en donde se encontraban atrincherados.
De acuerdo a un video que circula en Facebook, elementos de la Guardia Nacional fueron quienes tomaron por asalto a los moradores de la vivienda, mientras que el perímetro era resguardado por personal del Ejército y de las policías Municipal y Estatal.
Además de los siete detenidos, cinco hombres y dos mujeres, las autoridades encontraron dentro del inmueble un verdadero arsenal compuesto por 4 ametralladoras, 4 fusiles de asalto, un Barret calibre 50, que atraviesan cualquier blindaje, también dos aditamentos lanza-granadas, cartuchos útiles de distintos calibres y chalecos balísticos.
Los detenidos junto con el armamento fueron puestos a disposición de la Fiscalía General de la República (FGR) para los fines legales correspondientes.
“Con estas acciones se fortalecen las condiciones de paz y seguridad en los ciudadanos, limitando los hechos delictivos que perjudican el desarrollo y crecimiento de la sociedad, creando condiciones adecuadas para nuestra niñez y juventud sonorense”, señala el boletín de prensa emitido por la Sedena. @