Nueva atrocidad, crimen de maestros jubilados
Bibiana García GarzaEl crimen del que fue víctima un matrimonio de maestros jubilados la semana pasada provocó gran indignación en San Luis Río Colorado y en todo el estado tanto por la brutalidad del homicidio como por la ineficacia que han mostrado las autoridades ante el caso pues a una semana de la tragedia aún no hay pistas de él o los homicidas, ni tampoco detalles en torno al misterioso robo que se cree, fue el móvil del asesinato
Hace dos semanas, los señores Fausto Pillado Soto de 70 años de edad, y Delfina Padilla Chávez, de 72, dos reconocidos docentes jubilados que dedicaron su vida entera al servicio del magisterio en primarias y secundarias de esta localidad, salieron con rumbo a Puerto Peñasco encomendados a la labor que realizaban desde hace algunos años, la venta de libros y material didáctico en diferentes municipios del norte de Sonora.
Como muchos de sus conocidos los describen, el matrimonio de maestros, sindicalizados en la Sección 28 del SNTE, siempre mantuvo el espíritu de seguir en el servicio de la enseñanza y eso era precisamente lo que hacían con la nueva actividad que estuvieron desempeñaban después de su jubilación.
En ese afán, el pasado sábado 01 de noviembre la pareja emprendió un viaje sin retorno al interior del estado con destino a Puerto Peñasco, a bordo de su automóvil Chrysler Voyager modelo 2005 color blanco y de modesto aspecto.
Una vez en Puerto Peñasco, los señores Fausto y Delfina pernoctaron y continuaron con sus labores el día domingo 02 de noviembre por la mañana para posteriormente trasladarse a la ciudad de Nogales, a eso del mediodía.
Ese fue el último día que se supo de ellos, según indicaron sus familiares, pues aproximadamente a las 12:00 horas se comunicaron con una maestra de Nogales, Luz del Carmen Moreno, con quien quedaron de verse, aproximadamente a las 18:00 ó 19:00 horas.
Inclusive, poco más tarde pasaron por Ímuris, desde donde también llamaron al profesor Eduardo Rubio, con quien quedaron de verse al día siguiente.
De acuerdo al registro de los hechos, los docentes pernoctarían más tarde en el Hotel Estrella Dorada de Nogales, a donde siempre llegaban, por el Kilómetro 11.5 de la Carretera Internacional, a siete kilómetros del Consulado de Nogales, es decir, a unos 20 minutos del puerto de cruce internacional.
Sin embargo, al paso de las horas los familiares en San Luis Río Colorado se percataron de que los señores no se comunicaban -como era su costumbre- y llamaron al Hotel Estrella Dorada, donde según la información que se ha dado a conocer en medios regionales, primero les dijeron que sí estaban hospedados, y luego que no era así.
En ese ánimo de incertidumbre transcurrió la interminable semana para la familia, que para el día jueves ya había hecho pública la desaparición de los profesores a través de todos los medios: autoridades, medios de comunicación y redes sociales.
Mientras continuaba la búsqueda, el día viernes las autoridades confirmaron el hallazgo de dos cuerpos en el tramo Magdalena de Kino – Santa Ana, Kilómetro 201 de la Carretera Federal 15, al fondo de un pronunciado desnivel, ambos coincidiendo con las edades de los desaparecidos.
Las condiciones en las que se encontraron los cuerpos, envueltos en bolsas negras y cubiertos con cartones de cajas para libros, mostraban signos de tortura y estaban atados de los pies y las manos, por lo que se presume que fueron asesinados de manera violenta, aunque no se han dado a conocer resultados de las autopsias.
Más tarde, los familiares fueron llamados a identificar los cadáveres y fue así que se confirmó la triste noticia de que los restos correspondían a los señores Fausto Pillado y Delfina Padilla.
Hasta donde se sabe, se cree que el motivo del mortal atraco fue el robo del dinero que con esfuerzos habían logrado reunir con el trabajo de venta de libros durante casi un año en el norte del estado, y que también estaban recolectando durante éste, su último viaje.
Claman justicia
La noticia del trágico acontecimiento estremeció a toda la comunidad que externó sus condolencias a través de redes sociales y medios, a la par de la exigencia para que las autoridades den cuanto antes con los responsables y se haga justicia.
Ese clamor se reflejó también el pasado lunes 10 de noviembre durante el cortejo fúnebre de la pareja de docentes que se llevó a cabo a lo largo de diferentes calles y avenidas de la localidad, en la que hicieron presencia más de 200 personas a bordo de decenas de vehículos, entre familiares, amigos, conocidos y colegas docentes (activos y jubilados), así como otros compañeros que se solidarizaron de la Sección 28 del SNTE.
La procesión, en la que los integrantes llevaban algunas pancartas y fotografías de los maestros, así como pintas en los vidrios de los automóviles con leyendas como “Castigo a los responsables” y “Exigimos justicia”, partió de la funeraria Jardines del Paraíso, de la calle Quinta y callejón Revolución con rumbo a la Parroquia Santa Eduviges, en donde se llevó a cabo la misa de cuerpo presente.
Camino al Panteón Municipal en el que se daría sepultura a los profesores, el cortejo fúnebre pasó por la escuela primaria Club de Leones, en donde por muchos años trabajó el maestro Fausto Pillado como Supervisor Escolar de la Zona No. 31, y también por las instalaciones de la Sección 28 del SNTE, por la avenida México, entre las calles Siete y Ocho.
Como última parada, antes de retomar el camino hacia la última morada de los señores, el cortejo se detuvo durante algunos minutos por las oficinas de la Procuraduría General de la República (PGR), en donde se escucharon los cláxones al unísono, así como el clamor por justicia con gritos ahogados en dolor, impotencia y coraje.
Aunque no salió nadie de la PGR para escuchar las demandas, en ese momento una de las hijas de los profesores, Marlene Pillado Padilla, descendió del vehículo para colocar una pancarta en las oficinas federales mientras entre lágrimas advertía que no pararán hasta que se haga justicia en torno al caso de sus padres, que se investigue a fondo, y se imparta un castigo para los responsables.
A unos días del sepelio, el señor Pascual Padilla, familiar de la pareja, confirmó a CONTRASEÑA que se estarán tomando cartas en el asunto para que se realicen las investigaciones correspondientes aunque se limitó con la información para no afectar o interferir con el trabajo que se está llevando a cabo con las autoridades.
“Por el momento los elementos que tenemos para trabajar son confidenciales, se estarán manejando con mucha discrecionalidad y son muy pocos, aunque todo lo que se vaya haciendo será de lado de las autoridades”, indicó.
Aun así, agregó, en su momento se dará a conocer a la prensa sobre los resultados o las acciones a llevar a cabo pues por el momento no hay condiciones de aportar datos para que se hagan públicos en torno al caso.
El presunto robo
En cuanto a lo que se dice acerca del caso y los señalamientos que ha habido sobre la poca capacidad que tienen las autoridades para garantizar la seguridad de los ciudadanos en las vías de comunicación, o en los municipios y comunidades rurales al interior del estado, lo cierto es que las condiciones que rodean el asesinato de los maestros permanecen como todo un misterio.
Aunque ha trascendido que la pareja fue despojada del dinero que llevaban en efectivo y también de lo que tenían en cuentas bancarias mediante tarjetas de crédito, dicha información no ha sido confirmada, pero sí se corroboró por parte de las autoridades que el vehículo Chrysler Voyager modelo 2005 color blanco en el que viajaban sigue desaparecido.
En la opinión de algunos conocidos de los docentes, el asalto no pudo haber sido una coincidencia pues resulta difícil de creer que los hayan elegido como blancos de robo al azar justo el día en que, se supone, llevaban consigo una suma de dinero que habían cobrado por la venta de material didáctico en varios municipios.
Otras versiones no oficiales mencionan que el dinero con el que contaban ya estaba depositado en sus cuentas bancarias y que se les obligó a sacarlo de algún cajero aunque ello solamente forma parte de las especulaciones en torno al caso.
De cualquier modo, es posible que quien o quienes cometieron el asalto estaban conscientes de que los señores llevaban esos ahorros consigo, que de manera honrada habían logrado fruto de su trabajo.
Aun así, prevalece el reclamo por los niveles de inseguridad y falta de vigilancia en la que se encuentran algunos tramos carreteros al interior del estado, en donde se tiene conocimiento de otros asaltos así como de la instalación de falsos retenes y otro tipo de atracos, sobre todo a altas horas de la noche.
Ante esas pistas, sin embargo, las autoridades todavía no han dado con los responsables ni con el vehículo, que es lo que ha despertado con mayor intensidad ese clamor por justicia pues la percepción ciudadana se mantiene en la ineficacia de los oficiales encargados de la procuración de justicia y de investigaciones policiales.
Se manifiesta el SNTE, exige respuesta a las autoridades
En torno al caso, también se manifestó a través de su dirigente estatal la Sección 28 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), a la que pertenecían los esposos Pillado Padilla.
En un manifiesto publicado por el presidente del Comité Ejecutivo de la Sección 28 del SNTE en Sonora, Francisco Javier Duarte Flores, desde el día lunes 10 de noviembre, se exige el pronto esclarecimiento del crimen.
Dicho documento, en solidaridad y apoyo a los familiares de los compañeros, se pide que se castigue con todo el peso de la ley a quienes resulten responsables así como que se ponga un alto total a la ola de violencia que ha azotado al estado de Sonora ocasionando un clima de inseguridad e incertidumbre.
Ese sentir ante las condiciones de inseguridad que priva en Sonora se ha expresado recientemente también por el asesinato de cuatro agentes de Seguridad Pública Municipal en el municipio de San Ignacio Río Muerto, en donde inclusive hay oficiales que han presentado su renuncia ante las circunstancias de peligrosidad que perciben en los alrededores.
En el caso de los maestros, no obstante, la exigencia no quedará en un manifiesto, sino que se llevarán a cabo protestas pacíficas en diferentes escuelas del nivel básico de la localidad, por parte de los docentes, para manifestar solidaridad y exigir acciones en torno al caso de los maestros.
Según anunció el secretario general de la Sección 28 del SNTE en San Luis Río Colorado, Salvador García Villanueva, la estructura sindical en relación con autoridades educativas donde laboraron los docentes fallecidos, como las primarias de la Zona Escolar # 31 y la Escuela Secundaria General Capitán Carlos G. Calles # 3, llevará a cabo dichas protestas y colocarán mantas alusivas al caso.
“En el magisterio existe mucha indignación por el asesinato de los compañeros, el manifiesto que se hace exige el esclarecimiento del caso, el castigo a los responsables y que se ponga un alto a la violencia, nosotros aquí en lo local vamos a hacer esas diferentes acciones y aquí mismo en la coordinación”, asentó.
Por último, pidió al gobierno del Estado que ponga más atención en atender el clima de inseguridad que se vive en Sonora para que casos como estos no se repitan porque cualquier persona, tanto del magisterio como de la sociedad en general, puede ser víctima de una tragedia de este tipo, motivo por el que también es necesario aplicar correctamente la ley y el castigo para que los delitos de esta magnitud no queden impunes, “…hay que darle seguridad y tranquilidad al pueblo”, demandó. @