Las trampas de los comerciantes por el Buen Fin
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En medio del alboroto por el “Buen Fin”, que supuestamente oferta los mayores descuentos en productos y servicios de todo el año, también existe el llamado a las personas a cuidar su aguinaldo y su dinero para que no se dejen llevar por los impulsos del consumismo que se promueven cada vez con mayor fuerza en el país y que no siempre representan un ahorro, sino muchas veces también un desfalco que tampoco beneficia demasiado a los comerciantes
Bibiana García Garza
En tiempos en los que las palabras “oferta”, “descuento”, “gratis” y “ahorro” son etiquetas que saltan a la vista de habitantes de un país que vive crisis cada año por aumento de impuestos y una calidad casi estática del salario, el Buen Fin se ostenta como una oportunidad que llega para salvar el día y beneficiar a consumidores y comerciantes, aunque sea por un fin de semana.
Sin embargo, desde que se implementó esta versión del Black Friday (Viernes Negro) ´a la mexicana´, han ido surgiendo prácticas conocidas ya muy bien en el mundo del comercio pero aprovechadas por la histeria colectiva de consumidores que acuden compulsivamente a las tiendas a “ver si es cierto eso del Buen Fin”, así como a ver qué descuentos pueden aprovechar.
En días recientes, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) detectó que varias tiendas aumentaron desde el diez hasta un 40 por ciento los precios en electrodomésticos y otros productos hace un par de semanas.
Esto con el fin de “rebajar” el precio, al costo inicial del producto, y no perder, mientras que los consumidores se hacen la ilusión de que ahorraron en la compra de su nuevo televisor, o su nueva computadora.
Esto en medio de la premura de encontrar bajos precios y descuentos, con lo que el consumidor tampoco se da el tiempo de comparar precios y se deja llevar por sus impulsos, sobre todo contando con parte del dinero que muchas empresas o los propios gobiernos han adelantado a sus trabajadores como parte del aguinaldo 2015.
Además, según se ha demostrado, aquí en México los precios no bajan tan significativamente como en el Black Friday de Estados Unidos, cuyos descuentos superan el 50 por ciento de descuento, a pesar de que el Buen Fin promete rebajas de hasta el 80 por ciento, aunque hasta la fecha no hay testimonio de consumidores mexicanos beneficiados por ese tipo de privilegios en sus compras.
Reactivar el comercio local
Aquí en frontera efectivamente es difícil compararse con Estados Unidos, admitió el presidente de la Cámara Nacional de Comercio en San Luis (Canaco), Álvaro Gutiérrez Esquivel, porque hay ciertas desventajas, sobre todo por la cercanía con ese país.
Sin embargo, comentó, este año se confía que por el precio del dólar y el hecho de que no se ha ampliado todavía el monto de la franquicia que pueden cruzar los residentes fronterizos por la Aduana Mexicana, se pueda tener éxito en esta quinta edición del Buen Fin.
“Sí competimos con el Black Friday, y hay algunos productos que definitivamente salen más económicos allá, pero aquí nos puede beneficiar comprar por la cercanía, y el hecho de que muchos artículos ya se venden importados, con factura y garantía”, señaló.
Esto además, afirmó, de que se trata de un impulso al comercio local, cuya participación aumenta gradualmente cada año.
En el 2014 participaron alrededor de 40 empresas sanluisinas, mientras que este año se espera que se registren en el programa entre 50 y 60 entre las locales y las nacionales con franquicias y sucursales en esta ciudad como Telcel, Telnor, Bodega Aurrerá, o Soriana, entre otros, mencionó.
Y es que la ventaja para el comerciante es que puede llegar a reportar un aumento de ventas hasta del 40 por ciento, comparado con un fin de semana cualquiera, como ha ocurrido en años anteriores.
Esto a la vez que ofrece a los consumidores, dijo, la oportunidad de adquirir artículos y servicios a precios más económicos y al alcance de su bolsillo.
“Se trata, al igual que otros años, de incentivar a consumidores a que compren productos en la ciudad y reactivar el mercado interno con esas ofertas son las mejores que un comercio ofrecerá en todo el año”, aseguró.
Esto incluye los descuentos en vísperas y posteriores a la Navidad, el verano o la temporada de Regreso a Clases, con rebajas en los precios desde el 5 hasta el 70 u 80 por ciento en ciertos comercios y en ciertos productos.
Asimismo, comentó que desde el viernes 13 que da inicio el Buen Fin, hasta el lunes 16 de noviembre, Profeco mantendrá vigilancia en comercios para verificar que se respeten las ofertas y que no participen empresas que no se registraron previamente para ofrecer descuentos del Buen Fin.
En ese sentido, indicó que permanecerán al pendiente de los llamados y denuncias de los consumidores en torno a cualquier problemática que se pudiera presentar en un establecimiento comercial relacionado al Buen Fin.
Al igual que en años anteriores, quienes paguen con tarjetas de crédito o débito automáticamente participarán en un sorteo del SAT, con el cual, de resultar ganadores, recibirán un reembolso del cien por ciento en el producto que adquirieron con un costo de los 250 a los 10 mil pesos, agregó.
Para ello se cuenta con una bolsa de 500 mil pesos a nivel nacional, y se tiene registrado que en 2014 resultaron agraciadas 149 mil personas en todo el país.
No obstante, las cifras alegres y las declaraciones en el sentido de que se trata de un “ganar-ganar” no le quitan al Buen Fin su estigma de estrategia comercial que también tiene aspectos en los que realmente no se gana mucho, inclusive por parte de las empresas.
Y es que en años anteriores ya se han reportado casos de negocios, muchos de ellas locales, cuyos propietarios aseguran que no recibieron muchos beneficios y que sus ventas no aumentaron significativamente tampoco.
Oportunistas
Sin embargo, este año muchos optaron nuevamente por echar la moneda al aire y algunos otros se fueron por el lado del oportunismo.
De hecho, la Profeco ya sancionó esta semana a cuatro tiendas departamentales por incrementar el precio de productos para luego “disfrazar” descuentos durante el apogeo del Buen Fin.
Entre esas tiendas se encontró a Elektra, Coppel y Famsa, así como la Salinas y Rocha, quienes incrementaron hasta mil pesos el precio de electrodomésticos y línea blanca, una práctica que efectuaron también el año pasado.
En este sentido, Profeco advierte que las multas por concepto de publicidad engañosa ascienden hasta los 2.5 millones de pesos, y que desde hace al menos dos meses que se han emprendido operativos de vigilancia a nivel nacional para detectar este tipo de irregularidades.
En todo el país se han detectado ya 460 empresas que lo han hecho, por lo que el llamado de alerta a los consumidores está dado por los mismos hechos, así como por parte de Profeco, que exhorta a los mexicanos a presentar denuncias en este sentido a la línea gratuita: 01 800 468 8722, disponible en un horario de las 09:00 a las 21:00 horas. @
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