En el PAN Estatal: Se va Juan Valencia, llega Guillén ¿y luego Munro?

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Humberto Melgoza Vega

SAN LUIS RIO COLORADO.- La visita de Ernesto Munro a San Luis Río Colorado con la intención de medir el terreno, de buscar los consensos que le allanen el camino hacia la dirigencia estatal del PAN, ésa que está por abandonar un Juan Valencia por demás desgastado, para que venga el ex alcalde Leonardo Guillén a cubrir un interinato, trae un mar de fondo.

Guillén llegaría a esa posición con el visto bueno de la dirigencia nacional, en particular del secretario general, el también sonorense Damián Zepeda, con la misión de reencauzar los esfuerzos de Acción Nacional y organizar el proceso de elección interno, lanzar la convocatoria y hacerla de árbitro en un proceso que se antoja complicado, además de reñido ante la gran cantidad de “suspirantes”.

Se entiende que Leo Guillén vendrá a cubrir un interinato pero si los contendientes no se ponen de acuerdo, si no existen las condiciones propicias, siempre existirá la tentación de imponerlo como delegado para que se quede al frente del PAN por mucho más tiempo que solo dos meses.

Ernesto Munro se muestra confiado de que Guillén, con quien se reunió en privado durante su visita del pasado lunes, estará lanzando la convocatoria a finales de este año o principios del otro “y yo voy a estar en la boleta”.

Destaca que la figura del delegado es muy distinta a la de alguien que viene a cubrir un interinato. El último delegado que tuvo el PAN sonorense fue en 1997, cuando llegó Manuel Espino enviado por el entonces dirigente nacional Felipe Calderón “pero ni de lejos son las mismas circunstancias”.

Y enfatiza: “Yo no creo que vayan a poner un delegado, no estaría de acuerdo con la figura de una delegación y lo digo con mucho respeto para las autoridades nacionales del PAN. Lo que sí considero es que será un interinato para cubrir el último periodo de gestión de Juan Valencia, que concluye en febrero de 2016. Yo no estaría de acuerdo en que fuera algo prolongado porque ya vienen los preparativos de la elección de 2018 y hay mucho trabajo por hacer, en especial ir preparando los cuadros del sector femenil que por ley deberán ocupar el 50 por ciento de las candidaturas y si tú me preguntas si en este momento los tenemos, te diría que no estamos preparados”.

Munro rechaza que Acción Nacional se deshaga de sus cuadros cuando dejan de serle útiles, como en el caso del aún presidente del Comité Estatal, Juan Valencia, a quien le tocó cargar con la dolorosa derrota en las elecciones del 7 de junio pasado y quien está a punto de ser relevado. Reconoce, sí, que el liderazgo de Valencia Durazo está desgastado, que en lo personal se siente cansado, dolido y desmotivado por lo que es necesario que venga un bateador emergente con toda la energía para no cederle ni un ápice de terreno a los integrantes del “otro Sonora ya”, los de la “honestidad total”.

“Para empezar Juan Valencia es mi amigo, él es un hombre tranquilo, no es un hombre de controversias, es mesurado, conciliador y bajo ninguna circunstancia lo responsabilizo del resultado de la elección, yo creo que todos tuvimos que ver”, acepta.

Entrevistado en las oficinas de CONTRASEÑA, Munro Palacio reconoce que el PAN atraviesa por su momento más difícil, luego de perder de manera estrepitosa la gubernatura, con una diferencia de más de 60 mil votos, además de la capital del estado, Hermosillo, entre otras ciudades importantes.

Sin embargo, rechaza que el blanquiazul se encuentre en la lona.

“No coincido en que el PAN se encuentre en la lona, si bien perdimos la gubernatura nuestra votación fue de 420 mil votos, nos fue bien a secas, pero no nos fue excelente, no pudimos ganarle al PRI, que nos rebasó con 60 mil votos. Mi meta es ir recuperando posiciones, ciudades importantes como Hermosillo y Ciudad Obregón y sobre todo ganar por primera vez la mayoría en el Congreso del Estado, que nunca la hemos tenido, mas que haciendo alianza con otros partidos”.

“Este es el momento de sacar la casta, de redirigir a Acción Nacional por la senda de la victoria y coadyuvar con el CEN en los procesos que se vienen. Hay que reorganizar al partido, motivar a la militancia, hablar de las cosas buenas que tiene el PAN, pero también reconocer los errores y corregirlos”.

Con la inclusión de Neto Munro suman ya seis o siete los aspirantes a la presidencia del Comité Directivo Estatal, unos con más posibilidades que otros, con mayor seriedad que otros, como David Figueroa, Alejandro López Caballero, Gustavo de Unanue, Gildardo Real, Enrique Torres y la diputada Célida López, rocaportense al igual que el ex secretario de Seguridad Pública, más los que se acumulen.

“Créeme que si tuviéramos que decidir entre uno y otro nos pondríamos totalmente de acuerdo pues somos muy buenos amigos y somos parte de un mismo equipo. Ella es una muchacha de mucho carácter, muy valiente, además con muy buen perfil, es mi paisana. Somos un partido que ama la democracia y uno aprovecha este tipo de oportunidades para medirse. Ella al igual que los demás nos vamos a medir cuando el PAN lance la convocatoria para clarificar las reglas, ahí es donde varios de esos siete pudieran desistir, quiero dejar muy claro que yo voy hasta el final, ‘voy derecho y no me quito’, como dice un amigo, y tengo otro refrán que utilizo desde hace muchos años: ‘ni un paso atrás’”.

Con 36 años de militancia en el PAN, Munro se jacta de tener muchas amistades a lo largo y ancho del estado, panistas que le han refrendado su apoyo en esta nueva aventura partidista, “incluyendo gente muy representativa de San Luis Río Colorado. En este proyecto cabemos todos”.

Combate a la corrupción

Acusados con índice de fuego de haber incurrido en actos de corrupción, los ex funcionarios del llamado “Nuevo Sonora” parecen taparse con la misma cobija “pero yo me tapo nomás con la mía”, ataja Munro Palacio.

Y agrega: “Yo ni acuso ni exonero a nadie, y cada quien es responsable de sus actos. Yo tuve una responsabilidad y soy responsable de las auditorías que se hayan hecho o que se hagan en la Secretaría que yo ocupé; yo responderé por mí y con todo, tengo la conciencia tranquila porque sé que nunca hice nada indebido de manera deliberada”.

Recuerda que hace unas semanas pretendieron inculparlo de malos manejos en la SSP “y tuve que salir a dar la cara, por cierto acompañado de los diputados del PAN y del propio dirigente estatal, hasta de los regidores de Hermosillo. Lo que hay hasta el momento es una campaña de linchamiento público, una campaña de desprestigio muy bien orquestada, en la que se sigue un guión pero que no tiene mayor sustento, todo es pura paja”.

Empresario, dueño de flotas pesqueras, restaurantero, Neto Munro afirma ser un ciudadano de clase media que entró al servicio público de manera “vocacional”, con la intención de servir, no de servirse como lo hacen muchos con la cuchara grande.

“A mí nadie me obligó, mi participación en política la inicié en el ’79, en el ’82 me afilié a Acción Nacional, en tiempos en los que era muy difícil ser oposición; sufrí una persecución por parte del PRI-Gobierno, con auditorías, campañas de desprestigio y resistí los embates. Tuve que escapar en el ’91, viví un año en Tucson y otro en Baja California, evadiendo la represión por parte del PRI-Gobierno”, recuerda.

A propósito de colorados, el aspirante a la dirigencia estatal del PAN apunta que aún es muy pronto para evaluar el desempeño del gobierno encabezado por Claudia Pavlovich Arellano.

“Hasta la fecha prácticamente no ha hecho nada, salvo dos récords Guinness, uno en barrido y otro en carne asada, lo demás han sido discursos anticorrupción, como dije, acusaciones sin sustento todavía y cortinas de humo, pero debo reconocer que es muy pronto para catalogarla; yo tengo la mejor impresión de Claudia, la conozco de tiempo atrás y sé que es una mujer de bien. Como sonorense aspiro a que le vaya bien a ella, para que le vaya bien a Sonora, eso no va a impedir que nosotros ganemos las próximas elecciones de 2018. De entrada hay que concederle el beneficio de la duda”, finaliza. @

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