Semanario Contraseña

La clave de la información

De 2016 a la fecha han sido asesinados en México 31 sacerdotes

Joaquín Hernández Sifuentes, el sacerdote que la Diócesis de Saltillo reportó desaparecido desde el 3 de enero, fue encontrado sin vida el jueves en el municipio de Parras de la Fuente, en el estado de Coahuila, en el norte de México.

El lugar en donde encontraron el cadáver del religioso se encuentra resguardado por la Procuraduría de Justicia del estado de Coahuila para recolectar las pruebas que sirvan para dar solución al crimen, informó la autoridad estatal por medio de un comunicado.

“El cuerpo  fue trasladado al Servicio Médico Forense para realizar la necropsia correspondiente y determinar las causas del fallecimiento”, se lee en el comunicado. “La Procuraduría General de Justicia del Estado continúa con las indagatorias para judicializar a quien resulte responsable de este homicidio”.

Las autoridades estatales no dieron información sobre las probables causas de la muerte del sacerdote, sólo comunicaron que se abrió una averiguación por homicidio, la cual se incorporó a la carpeta de investigación.

El automóvil del sacerdote fue localizado en el municipio de Santa Catarina, en el estado de Nuevo León. Vecinos del padre reportaron haber visto a un par de jóvenes subir al coche, sin el religioso el tres de enero, mismo que día en que se vio por última vez al párroco. Las autoridades de Nuevo León realizarán las investigaciones periciales en el vehículo para ayudarle a la procuraduría de Coahuila con la investigación.

A través de un comunicado difundido en Facebook, la Diócesis de Saltillo agradeció y reconoció el trabajo de la Procuraduría de Justicia de Coahuila por haber localizado el cuerpo del sacerdote Joaquín Hernández Sifuentes.

El sábado 7 de enero la propia entidad religiosa lanzó un comunicado de prensa con la denuncia de desaparición de Hernández Sifuentes. En el documento exigían a las autoridades de Coahuila que trabajaran en el esclarecimiento de la desaparición. Sospechaban que había sido víctima de secuestro. Ahora serán las propias autoridades las que definan el móvil del crimen que terminó con el asesinato del padre.

Según cifras del Centro Católico Multimodal, una instancia del Episcopado Mexicano, desde el 2016 a la fecha, en México, 31 sacerdotes fueron asesinados. Además, la misma instancia considera a México el país más peligroso de Latinoamérica para ser sacerdote.
Las agresiones más comunes de las que los párrocos son víctimas son el asesinato, secuestro, extorsión y robo a mano armada.

Redacción / Cultura Colectiva

Deja un comentario

× Platique con nosotros