Alarma en industria y comercio por aumento de tarifas eléctricas

Escalada de precios, inflación, quiebra de empresas y crisis entre muchas otras consecuencias son las que avizora el sector empresarial e industrial de la región a raíz del reciente aumento de tarifas eléctricas que aunque no será tan alto como se planteó inicialmente, no dejará de afectar a los bolsillos de los mexicanos a lo largo de todo el año, que encima de todo es electoral

Bibiana García Garza

Graves problemas económicos son los que se prevén a corto plazo con el aumento de tarifas eléctricas que, aunque este mes se recalibraron a causa de las protestas -principalmente del sector industrial en la región Baja California-San Luis Río Colorado-, seguirán afectando más adelante también al sector comercial y, por consecuencia, a la población en general.

Como se recordará, el mes pasado entraron en vigor los nuevos métodos para calcular el precio de la energía basados en el costo de producción y distribución del servicio así como la variación mensual de los costos de los combustibles fósiles utilizados para la generación de energía eléctrica, aprobados por la Comisión Reguladora Energética (CRE) el 23 de noviembre de 2017.

Entonces, se estableció que se aplicaría un periodo de transición de diciembre de 2017 a marzo de 2018 para que los usuarios del servicio se familiaricen de manera gradual con el nuevo esquema tarifario, cuyas bases se ponderarán con base en la actualización tendencial de las tarifas eléctricas de noviembre del año pasado.

Además de tomar este nuevo esquema tarifario, determinado por la CRE, se anunció que se aplicarían las tarifas definidas por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) para usuarios domésticos y agrícolas de estímulo.

Sin embargo, al empezar a distribuirse los primeros recibos de alta y media tensión en el sector industrial, los empresarios advirtieron aumentos que iban de un 100 hasta un 300 por ciento en los cobros de su materia prima para trabajar, siendo el estado de Baja California –y San Luis Río Colorado- la región más afectada del país por su cercanía con Estados Unidos.

Luego del estira y afloja entre el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) de Baja California y las cámaras empresariales, la Superintendencia de CFE en la zona Mexicali-San Luis Río Colorado autorizó una prórroga para las empresas en el pago del recibo de diciembre de 2017.

Cabe mencionar que esta situación repercutió tanto en Baja California como en San Luis Río Colorado, Sonora, en el retraso de la entrega de los recibos de energía eléctrica, lo que generó incontables quejas de los usuarios (domésticos y comerciales) que preguntaban desesperados por su recibo de la luz en el temor de que se les pasara la fecha de corte y se quedaran sin energía.

La explicación oficial de CFE fue que el retraso se debió a una “falla técnica”, pero en realidad fue por la mencionada prórroga establecida hasta el día 25 de enero, tiempo en el que se llevará a cabo la revisión de los nuevos factores de cobro y el ajuste al método de cálculo de las tarifas (refacturación).

Finalmente, se estableció que la refacturación del mes de diciembre de 2017 quedaría en un 4.7 por ciento de aumento, cobro que se estará viendo reflejado en los nuevos recibos que se entregarán próximamente, uno mucho menor al que se había planteado en un principio, con lo que se resolvió el problema de los usuarios de alta y media tensión (industria).

Desacierto de la CRE, sombrío panorama para 2018

Sobre el tema, el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) en Mexicali, Rodrigo Llantada Ávila, opinó que con lo ocurrido se hizo evidente un grave desacierto por parte de la Comisión Reguladora de Energía en la fórmula para aplicar los cobros de las tarifas eléctricas para la región Baja California, Baja California Sur y San Luis Río Colorado, Sonora.

La buena noticia es que ya se corrigió el error y los incrementos que venían del cien al 300 por ciento disminuyeron notablemente hasta un punto razonable, señaló, al menos en función de lo que se había cobrado al principio con el desacierto de la mencionada fórmula.

No obstante, consideró que todos los incrementos tienen un impacto, inicialmente para el sector comercial e industrial porque en alguna medida se traslada una parte al consumidor, aunque se procura que sea lo mínimo.

“Trasladamos una mínima parte al consumidor final porque tenemos muy claro que trasladar el cien por ciento del aumento golpea a la economía, genera una espiral inflacionaria y la gente pierde capacidad de consumo”, anotó.

Por desgracia, mencionó, el 2018 trae consigo un panorama muy complicado, no sólo por los aumentos en la energía eléctrica sino por otros ingredientes adicionales que, en el mejor de los casos, generarán volatilidad: un peso presionado, la reforma fiscal en Estados Unidos, la renegociación del TLCAN y el proceso electoral.

Esto sobre todo afectará a las ciudades fronterizas como Mexicali y San Luis Río Colorado por su influencia dolarizada que sin duda presionará al peso y de ahí se desprenderán otras dificultades que, sin duda, serán una constante a lo largo del presente año.

El problema es más serio de lo que parece

Por su parte, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) local, Héctor Manuel Cervantes Soto, advirtió que a pesar de la refacturación de los cobros a la industria, el impacto del aumento de tarifas será más que dramático durante el año en curso y que sin duda representará una traba al desarrollo económico de la región pues se reflejará en todos los sectores.

Esto porque de entrada, explicó, la modificación en el cálculo para el pago de la energía se empezó a aplicar con un algoritmo, una fórmula matemática para calcular los precios que, eventualmente, complicará la situación.

Además, las tarifas se incrementarán entre un 13 para el sector residencial y un 16 por ciento para el sector comercial, según fue publicado ya en el Diario Oficial de la Federación (DOF), precisó.

El problema es que dicha alza se aplicará hasta después de las elecciones en julio del presente año, señaló, y ahí es cuando sufrirá una fuerte afectación tanto el sector comercial, como el industrial y el área doméstica.

Las cámaras empresariales y los comerciantes en general no están de acuerdo en esta manera de aplicar los aumentos y calcular las tarifas, aseveró, pues la CRE generó un incremento drástico a través de una fórmula extraña que genera desconfianza entre los usuarios.

“Es una aberración lo que quieren hacer y ya se avizoran problemas en el corto plazo, así está la situación y es algo que sucederá con todos los sectores, ahora fue la alta y media tensión, pero en cinco meses van a seguir los comercios y el área residencial, y entonces habrá complicaciones”, externó.

Aumentos desproporcionados son improcedentes: Canaco

Debido a que los incrementos en las tarifas son considerados fuera de proporción, agregó el presidente de Canaco en este municipio, el sector empresarial está dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias para lograr que se reviertan.

En primer lugar, abundó, se solicitará una explicación de lo que está sucediendo al secretario de Energía, así como saber hasta dónde pretenden llegar.

“Es un panorama muy difícil y consideramos que la comisión actuó mal al modificar la manera en que se calcula el costo de la energía y aunque parte del mismo aumento desde noviembre-diciembre del año pasado, la Comisión Federal y la Secretaría de Energía no nos quieren decir la verdad de las cosas y eso está mal”, aseveró.

Y es que si se generan aumentos desproporcionados, resaltó, la industria hotelera y turística corre peligro, sobre todo en Baja California, lo que repercutirá en muchas otras cosas a pesar de que, de entrada, son incrementos improcedentes.

“Dentro de la fórmula nos quieren cargar el uso de las líneas de transmisión y toda esa cablería que nosotros ya pagamos con nuestros impuestos en el pasado ¿por qué me la quieren cobrar otra vez?; es un abuso, la autoridad está actuando de manera arbitraria y el sector empresarial no nos vamos a dejar porque entonces va a venir el cierre de empresas”, sentenció.

Sin duda, anunció, vendrán amparos del sector empresarial y hasta una declaración de no pago pues es muy posible que este proceso se extienda porque encima de todo se sumará a otros factores que golpearán el bolsillo de la población como la renegociación del TLCAN, la paridad del dólar y las elecciones.

“¿En qué cabeza cabe que el incremento autorizado del año pasado para las viviendas lo van a cargar hasta después de cinco meses? Eso no se vale, pero vamos a esperar a ver qué es lo que la CFE nos va a explicar sobre por qué cambiaron las formas de calcular los cobros de energía, qué fue lo que pasó y cómo evitar que suceda”, concluyó.@