Terrenos en La Grullita, una bomba de tiempo
Tras advertir que de un tiempo a la fecha en el ejido La Grullita se venden terrenos fuera de los límites de la ciudad ´a diestra y siniestra´ propiciando un crecimiento desordenado en la ciudad y sin respetar los acuerdos que se tomaron en la pasada administración, se gesta un nuevo conflicto entre el comisariado y el Ayuntamiento que podría trastocar intereses políticos.
Bibiana García Garza
SAN LUIS RIO COLORADO.- La redensificación o bien, un ordenado crecimiento de la ciudad, ha sido un tema que se ha venido procurando desde la pasada administración municipal, durante la que se firmaron acuerdos para mantener la densidad poblacional en sectores en donde ya se ofertan servicios públicos.
Apenas en julio el año pasado, el Gobierno Municipal celebraba la coordinación entre el ejido La Grullita y el 27 Ayuntamiento para apostarle al crecimiento ordenado y titular a más de 13 mil familias.
Previamente, en noviembre de 2015, se había firmado un acuerdo con La Grullita que especificaba que los servicios públicos del municipio llegarían hasta la avenida Filipinas, localizada al sur de la ciudad, hacia el ejido, con el fin de lograr el referido ´crecimiento ordenado´.
Entonces, el presidente del Comisariado de La Grullita era Gilberto Duarte Lazalde, quien tras la firma de ese acuerdo unánime se comprometió a seguir el Plan Municipal de Desarrollo Urbano con base en las disposiciones de la Ley General de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano.
Dicha legislación establece, a su vez, que la urbanización, fraccionamiento, transmisión o incorporación al Desarrollo Urbano de predios ejidales o comunales deberá contar con las autorizaciones favorables de impacto urbano, fraccionamiento o edificación por parte de las autoridades estatales y municipales correspondientes.
Sin embargo, del año pasado a la fecha se han seguido vendiendo muchos terrenos que sobrepasan los límites de la avenida Filipinas, hacia el Ejido La Grullita, y que ya no alcanzan la cobertura de servicios públicos, en lugar de que se vendieran los alrededor de 24 mil lotes baldíos que ofrece el Ayuntamiento ya con servicios y certeza jurídica.
Como se recordará, en agosto del 2016 la presidencia del Comisariado de La Grullita pasó a manos de la maestra Elvira Cid Lucero.
Ante el proceder del ejido, la semana pasada, durante la más reciente sesión ordinaria de Cabildo, el Presidente Municipal, Enrique Reina Lizárraga, expuso directamente el mal proceder en la venta indiscriminada de terrenos en La Grullita fuera de los perímetros establecidos.
Esto a raíz de la petición de la regidora del PES, Elsa Oralia Cruz Guevara, de que se les dotara de agua a las familias asentadas en los predios que van más allá de la avenida Filipinas, hacia la parte trasera del Panteón Municipal II.
Y es que, explicó el alcalde, el crecimiento urbano de la ciudad está establecido en el Plan Municipal de Desarrollo Urbano que tiene sus delimitaciones específicas y el ejido no está respetando los acuerdos predios.
“Hay una autoridad, en este caso el ejido, que no está respetando, y pues es obligación de nosotros también actuar en consecuencia”, advirtió ante los integrantes del Cabildo durante la mencionada sesión.
Aunado a ello, el pasado 05 de marzo boletinó un exhorto directo a La Grullita para que se sume a los esfuerzos del Ayuntamiento para lograr el crecimiento ordenado del municipio, recordando que hay más de 24 mil predios disponibles dentro de la mancha urbana que, en su mayoría, ya cuenta con los servicios públicos básicos.
Si no se cumple con eso, indicó, se genera un desperdicio de terrenos y de recursos ya que se ha invertido donde la densidad poblacional es muy baja.
Hasta el momento, no obstante, no ha habido un acercamiento con la presidenta del Comisariado de La Grullita, Elvira Cid, quien, dicho sea de paso, es madre de la diputada local, Lina Acosta Cid, y el siempre polémico abogado, Víctor Acosta Cid, quien se desempeñó como regidor “incómodo” del PAN durante la administración de Leonardo Guillén Medina.
Además, este conflicto pues, se destapa en víspera electoral y un proceso al interior del PAN en el que Lina Acosta no ha resultado favorecida del todo por sus compañeros albiazules, lo que ha dejado de manifiesto la división entre los grupos que la apoyan, y los que apuestan por Leonardo Guillén y Laura Núñez, la actual Síndico Procurador.
Con los actores políticos involucrados, es posible que de una u otra forma esta problemática entre Ayuntamiento y La Grullita pudiera hacer ruido durante las próximas campañas políticas.
El ejido, al borde de una demanda
Con la denuncia de los hechos puesta sobre la mesa, el ejido La Grullita se expone a una demanda por parte del Ayuntamiento como ya lo advirtió tanto el alcalde como sus regidores más allegados como el presidente de la fracción panista en Cabildo, Jorge Figueroa González, Abel Sánchez Cervantes y Edgardo Cota Casillo.
Durante la sesión de Cabildo en la que se ventiló el tema, Edgardo Castillo sugirió que las acciones que se vayan a tomar sean en contra del Ejido La Grullita, no en contra de las familias ahí asentadas.
Sobre todo, subrayó, se debe proponer que se le de uso y ocupación a los lotes que ya se tienen disponibles con servicios para evitar complicaciones durante la próxima temporada de verano.
“Ahorita estamos hablando de llevar agua en pipas y en verano es insuficiente, además del parque vehicular con el que contamos, no es lo correcto ni es lo sano estar llevando agua acarreada y pipas y ellos conserven en recipientes que quien sabe en qué condiciones pudieran estar”, comentó.
Por ello consideró necesario “ponerle un alto” al ejido pues al no hacerlo el Gobierno Municipal también se está convirtiendo en cómplice de ese crecimiento desproporcionado que se está dando de manera irregular.
Reveló también que muchas familias le han mostrado documentos de terrenos que han comprado en esos espacios en breña y que el costo de dichos solares se ha multiplicado.
Según ha trascendido, esos terrenos se están vendiendo en alrededor de 70 mil pesos que se deben pagar en el transcurso de un año, sin servicios y para los que también se debe pagar una renta de por lo menos 500 pesos anuales.
“… la pregunta es: ¿qué inversión hizo el ejido como para elevar los costos de esos lotes, y otra: actúan de manera muy amenazante con las familias que por alguna razón sufren un retraso en el pago de las rentas”, externó el edil.
En este sentido, el alcalde lamentó que las rentas que cobra el ejido son del doble del impuesto predial mientras que por la renta no se ofrece nada a cambio y por el predial se proporcionan servicios.
Reubicar a las familias es la única solución: Esqueda
Entrevistado al respecto, el regidor de Morena y ejidatario en Lagunitas, Efraín Esqueda Torres, se manifestó a favor de que se busque llegar a un nuevo acuerdo con el ejido La Grullita para que reubique a las familias hacia los espacios en donde sí hay servicios.
“Lo más adecuado es tener un nuevo acercamiento con el ejido y que recapaciten”, planteó, pues aunque el daño ya está hecho aunque, admitió, todavía se le puede dar solución a las familias que ahora están asentadas fuera del perímetro.
“… que entiendan que no deben de pasar por encima los acuerdos porque son dañinos para ellos mismos y para el Ayuntamiento, y que esa gente que está afuera de donde va el corte, hasta donde se había tomado el acuerdo, se puede reubicar, además de que ya no vendan más lotes fuera de esa zona”, anotó.
Asimismo, recordó esos lotes que ofrece el Ayuntamiento –por los que se piden alrededor de 40 mil pesos a pagar en abonos durante un periodo de por lo menos tres años- están solos y sí tienen servicios.
Inclusive, afirmó, muchos de esos predios ya habían sido vendidos pero nadie los habita desde hace años y por lo tanto sí se puede hacer uso de ellos.
“En los ejidos hay contratos de asentamiento humano y de rentas que tienen cláusulas muy específicas y muy claras donde dicen que una persona tiene un año para construir y bardear y todo, y si en un año no lo hace el ejido tiene el derecho de recoger todo lo que haya ahí, esos lugares son abandonados por acaparadores que compran y se van”, abundó.
Con esas alternativas puede trabajar el ejido, sin embargo, lamentó, el Gobierno Municipal va a tener que meterles presión pues si no acataran esas disposiciones se pudieran enfrentar a una demanda.
“Eso por no respetar el acuerdo que se firmó poco antes de que entrara la maestra, que hace caso omiso y hace como que no sabía”, acusó.
El problema se le viene al Ayuntamiento, argumentó, al que no le alcanzan ya los recursos para llevar agua cuando además no hay necesidad pues ya oferta predios que sí tienen servicios básicos.
Es por ese motivo, urgió, que se debe buscar obligar al ejido sin tener que recurrir a medidas tan drásticas como una demanda, sin embargo, si las cosas siguen como están sí se va a tener que actuar.
“Yo también soy ejidatario y soy campesino, pero también cumplimos nosotros, cada quien con los acuerdos que se toman en las asambleas, que son obligatorios y válidos, entonces no se vale que entren otros nuevos directivos y no se responsabilicen de sus acuerdos anteriores, como la maestra Elvira”, declaró.
En su experiencia, agregó, esos acuerdos se deben respetar pues la mayoría se hacen en asambleas ordinarias y se deben seguir independientemente de que se hagan con diferentes administraciones pues están asentados en actas y firmados.
“Lo que pasa es que hay algunos comisariados que entran y luego no quieren saber nada para atrás porque ellos no estuvieron, y hay algunos ejidos que no conservan sus archivos bien actualizados, tienen las actas pero luego dicen ´no pues no hay acta´ pero si las hay lo que pasa es que no las revisan y no tienen sus archivos bien custodiados”, aseveró.
Esto refleja un poco seriedad y da a pensar que la maestra Cid Lucero, refirió, no está pensando que hay actas archivadas ahí donde se comprometieron a no darle más terrenos a la gente donde no había servicios, además de que le conviene seguir vendiendo lotes sin cesar.
“El Doctor Figueroa manifestaba que había que demandar al ejido, buscando que se responsabilice del acta que está firmada pero yo no soy tan drástico con el campo porque pues la crisis que tenemos en el campo no está para tanto, pero sí hay que platicarlo y hacerles ver y entender que los acuerdos firmados están ahí y que son compromisos a respetar”, finalizó.
Cabe mencionar Semanario CONTRASEÑA buscó hablar con la presidenta del Comisariado del Ejido La Grullita, Elvira Cid para conocer su postura pero al localizarla le comentó amablemente a esta reportera que por el momento se limitaría a dar declaraciones y dentro de poco convocaría a una conferencia para hablar sobre el tema. @