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Patrulla Fronteriza Tras la huella de pandilleros

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Una investigación conjunta entre autoridades de México y de Estados Unidos tiene en la mira a un grupo de pandilleros locales quienes han incursionado en el tráfico de indocumentados, en especial de origen centroamericano. El cruce ilegal de guatemaltecos por esta frontera se ha incrementado en un mil por ciento tan solo en el último año.

Humberto Melgoza Vega

SAN LUIS RIO COLORADO.- Autoridades de México y de Estados Unidos realizan una investigación conjunta para atrapar y llevar ante la justicia a una conocida pandilla de San Luis Río Colorado que ha venido incursionando en el tráfico de personas.

Se trata de la pandilla de Los Wonders, quienes habían mantenido un bajo perfil, pero que a últimas fechas se han venido dedicando al tráfico de indocumentados, sobre todo de inmigrantes centroamericanos.

“Hay que ponerles un alto antes de que evolucionen y se conviertan en un problema mayor, como pasó en Ciudad Juárez con La Línea”, expone una fuente de alto nivel que participar en la investigación.

Al hablar de La Línea se refiere a una pandilla de la fronteriza Ciudad Juárez, Chihuahua, que al inicio eran delincuentes comunes, peleaban con otras pandillas por el territorio; luego fueron reclutados por el Cártel de Juárez, como “halcones” y sicarios, convirtiéndose en su brazo armado. Hoy en día forman un cártel independiente que se dedica entre otras actividades ilícitas al narcotráfico.

Identificados por las autoridades de la Patrulla Fronteriza como los Wonders Boyz Klika, esta agrupación de corte pandilleril encabeza en San Luis Río Colorado el contrabando de humanos.

En coordinación con la autoridades del lado mexicano han logrado identificar a una serie de integrantes de esta banda, quienes participan en la logística, traslado y como guías de los aspirantes a indocumentados.

Uno de los cabecillas es identificado como “El Snoopy”, quien se apoya en otros sujetos de los que se tienen nombres de pila y fotografías pero que para efectos de esta investigación identifican por sus apodos como “El Tigre” “El Niño”, “El Wero” y “El Chino”, entre otros, todos residentes de esta frontera.

Las autoridades migratorias norteamericanas están en alerta por la alta incidencia de indocumentados que están cruzando de manera ilegal hacia territorio gringo.

Ahora, el gran problema lo representa el hecho de que los indocumentados en cuanto cruzan la frontera de manera ilegal se entregan a las autoridades y enseguida piden asilo político.

Esta situación también está facilitando el trabajo de los traficantes de personas, comúnmente conocidos como “polleros” –“coyotes” les llaman los americanos— ya que ahora no se preocupan por cruzarlos y trasladarlos hasta las grandes ciudades como Phoenix o Los Angeles, sino que con pasarlos de aquel lado del muro metálico es más que suficiente.

Autoridades del lado mexicano tienen identificados dos puntos para el cruce ilegal de los indocumentados, uno es por la zona del río, donde termina la barda metálica, y sobre la avenida Internacional, entre las calles 40 y 50.

Frontera porosa

La actividad del tráfico de personas se había caído  en San Luis Río Colorado sobre todo por el reforzamiento en el control migratorio y a la construcción de tres cercos, lo que hacía muy complicado el cruce; el tráfico se había movido hacia Los Algodones y por Sonoyta, hacia el sur.

Pero en los años recientes se ha registrado un incremento exponencial, lo que indica que de nueva cuenta esta frontera está siendo atractiva para las bandas que se dedican al tráfico internacional de personas.

De acuerdo a estadísticas en poder de la Patrulla Fronteriza, de agosto a noviembre de 2015 por esta frontera cruzaron de manera ilegal poco más de 2 mil guatemaltecos, mientras que en ese mismo lapso de 2014 fueron arribita de 200, lo que habla de un incremento del mil por ciento, aproximadamente.

Cantidades similares se registran en el caso de los migrantes salvadoreños y hondureños y en menor medida los paisanos de origen mexicano.

En agosto del año pasado, en un hotel del centro de la ciudad, elementos de la Gendarmería Nacional en coordinación con funcionarios del Instituto Nacional de Migración (INM) detuvieron a 19 indocumentados provenientes de medio oriente, la mayoría menores de edad, quienes serían cruzados al otro lado con documentos falsos.

Privación ilegal

Al igual como sucede en fronteras más grandes como Mexicali o Tijuana, en San Luis Río Colorado ya se han presentado algunos casos de privación ilegal de la libertad contra migrantes, lo que podría configurarse como el delito de secuestro.

El modus operandi es el siguiente: a su llegada a la frontera, los migrantes son recibidos por los polleros, quienes los meten a la cajuela del vehículo, con los ojos vendados.

Los pasean por toda la ciudad y luego los meten a través de una cochera a una casa en algún fraccionamiento de la ciudad y los hacen creer que ya se encuentran en Estados Unidos, pero no los dejan salir hasta que se comunican con sus familiares y les exigen que les depositen fuertes cantidades de dinero.

Es hasta entonces que los abandonan a su suerte, de este lado de la frontera y sin dinero.

Esto pasó en esta ciudad en junio pasado, cuando un par de michoacanos fueron literalmente secuestrados por unos polleros quienes los metieron en una casa de seguridad ubicada en la colonia Aviación.

Los migrantes se dieron cuenta del engaño y se trenzaron a golpes con sus captores pero fueron sometidos y encajuelados y en el trayecto lograron escapar, tirándose del auto en movimiento, ante el temor de ser asesinados.

Más recientemente, una pareja de michoacanos fueron hospedados en el Hotel Roma del Centro de la Ciudad y no los dejaban ir hasta que no les entregaran fuertes sumas de dinero a sus captores. @

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