Cierre de importaciones abre paso a la informalidad
La publicación de los nuevos lineamientos del SAT limitan la importación de vehículos por esta frontera no sólo representó el tiro de gracia para los importadores y quienes trabajan en el giro automotriz sino que también genera la proliferación de autos ´chocolate´ que, a falta de consideraciones para su tránsito legal, recurren a agrupaciones diversas que les ofrecen protegerlos del decomiso y brindarles tranquilidad
Bibiana García Garza
A partir de este mes la Aduana de San Luis Río Colorado quedó fuera de la lista de fronteras mexicanas a través de las cuales se tendrá autorización para la importación de vehículos luego de la más reciente modificación a las reglas generales de Comercio Exterior para el 2017, del Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Cabe recordar que desde el 2014 el Gobierno Federal tomó la decisión de paralizar la importación de vehículos usados y realizar modificaciones en dichos procedimientos para favorecer a la industria automotriz nacional.
Inclusive en Baja California, por donde sí se permitirán las importaciones (por Tijuana y Mexicali), los importadores han externado que los nuevos lineamientos del SAT son insuficientes y en gran medida limitantes.
Sobre todo, y más aún en Sonora, no aportan una solución verdadera a la problemática de los vehículos irregulares de procedencia extranjera conocidos como “chocolates” que transitan tanto en este municipio como en el resto de la entidad.
Esto a pesar de que desde hace algunos años se ha insistido en la posibilidad de regularizar a este tipo de automóviles en Sonora, lo que además podría frenar la comisión de ilícitos a bordo de dichas unidades, un problema que se señala constantemente al hablar de este tema.
Cabe mencionar que en octubre del año pasado la gobernadora, Claudia Pavlovich Arellano, manifestó que ella estaría de acuerdo en una regularización por lo que las iniciativas presentadas al respecto desde el Congreso deberían analizarse a fondo.
“Yo estaría de acuerdo en un momento dado, porque sí, ya tenemos una realidad muy clara, y hay que saber quiénes son. Si legalmente se puede (implementar), es otra cosa que tenemos que analizar, yo tendría que checarlo con mi consejero jurídico”, externó la mandataria sonorense.
También, había resaltado la importancia de contar con un padrón de registro de los propietarios de este tipo de vehículos así como del número que transita en la entidad.
Mientras tanto, la situación sigue en pausa aunque con la garantía que dio a principios de este año el gobierno del estado de que no se realizarían decomisos de ´chocolates´ sin previa legalización con el fin de salvaguardar la economía de las familias sonorenses.
Se estima que en Sonora existen más de 300 mil vehículos ilegales -concentrados en su mayoría en Hermosillo-, lo que representa alrededor de un 35 por ciento del padrón vehicular registrado por la Secretaría de Hacienda, que es de 850 mil, según cifras dadas a conocer a principios del año pasado a través de medios estatales.
Esto coloca a Sonora entre uno de los estados fronterizos con mayor número de automóviles de procedencia ilegal a nivel nacional junto con Baja California, Chihuahua, Coahuila y Nuevo León, principalmente.
Ahora, con los nuevos lineamientos del SAT para las importaciones en San Luis Río Colorado, se calcula que dicha cifra sega yendo en aumento a pesar de que la importación sí estará permitida para los yonqueros, sólo bajo la premisa de que los desmantelen y vendan por partes, según confirmó Canaco San Luis esta semana.
Afiliadoras, la única alternativa
La situación es aprovechada por diversas agrupaciones que se ostentan como una solución para los propietarios de vehículos ´chocolates´ y garantizan que están facultadas para proteger el patrimonio de las familias.
Este tipo de asociaciones tienen presencia a nivel nacional y en esta entidad, entre las más grandes se encuentra la Organización Nacional de Protección al Patrimonio Familiar (Onappafa) que cuenta con más de 200 mil afiliados.
En dicha organización, se requiere a los propietarios de vehículos irregulares a realizar un pago de 900 pesos anuales para acceder a un seguro de daños a terceros así como a un registro que les protegerá de decomisos.
Otra es el Frente Estatal de Organizaciones Sociales (FEOS), que cuenta con más de 40 mil afiliaciones y se maneja con una dinámica similar.
En San Luis Río Colorado igualmente hay presencia de este tipo de agrupaciones como la del Comité Nacional Pro-Defensa de la Economía Familiar (Condefa) y EYM, Alianza Unida A.C., entre otras que se instalaron por un tiempo y luego partieron, o bien, que existen pero no cuentan con oficinas en la localidad.
En el caso de EYM, Alianza Unida A.C., manejada por Manuel Santeliz Ortiz, se ofrece a los afiliados un seguro ´Qualitas´ para daños a tercerlos y el registro, mientras que en Condefa Asociación San Luis Río Colorado se ofrece un engomado que garantiza protección e integración a un padrón único vehicular del estado de Sonora a cambio de un pago único de 500 pesos.
Dicho pago, asegura la coordinadora local de Condefa, Janney Zárate Tejeda, asegura atención vial las 24 horas a los afiliados en caso de que les sean recogidos los vehículos por la Dirección de Tránsito Municipal a causa de alguna infracción menor.
Sobre el tema, comentó que cada día se percibe que van en aumento las solicitudes de personas por el servicio es mucha la gente que en esta frontera adquiere vehículos en Estados Unidos de modelos que no se pueden legalizar, de 2003 para abajo.
“Es mucha la cantidad de gente que se acerca, y no nada más aquí en Condefa, sino que también cuando salimos a la calle vemos muchos carros que traen engomados de diferentes asociaciones”, señaló.
Además, en caso de que las personas pudieran tener la oportunidad de regularizar su vehículo son trámites muy costosos, por lo menos mil dólares, dependiendo del modelo del vehículo.
“Ahorita la mayoría de la gente compra carros americanos o los saca a crédito entonces ya cuando terminan de pagar es cuando les dan el título y para entonces ya pasó tiempo y luego no tienen dinero”, anotó.
En cambio, Condefa solamente solicita una copia del título o registración del vehículo más la cantidad de 500 pesos para que se pueda entregar el engomado tipo placa, lo que representa una alternativa más económica y, para algunos, la única alternativa.
Principalmente porque la mayoría de los solicitantes son personas que no quieren correr riesgos con su patrimonio pero tampoco quieren circular como “ilegales” por lo que al realizar el trámite en estas agrupaciones se identifican mediante documentos como credencial de elector y comprobante de domicilio (copias).
No obstante, Zárate Tejeda mencionó que no le es posible proporcionar cifras de los afiliados porque la agrupación a su cargo apenas reabrió sus puertas en San Luis Río Colorado luego de algunos años de ausencia tras la muerte del presidente nacional.
Y es que Condefa fue una de las primeras asociaciones de este tipo en llegar a esta ciudad en el 2010, recordó, sin embargo, tuvo que retirarse un tiempo, y apenas desde agosto del año pasado reinstaló un módulo y bajo la dirección de Juan Carlos Arceo Valenzuela, por lo que se sigue en proceso de renovación de afiliaciones hechas en aquellos años.
Por otra parte, indicó que Condefa está registrada en Hacienda y que se debe a atender a la gente las 24 horas del día para recuperar su vehículo en dado caso de que se les decomise, siempre y cuando no hayan cometido algún delito mayor.
“Es la garantía que uno les ofrece, más que nada por la confianza con la que vienen a empadronar su vehículo”, agregó.
Sin embargo, la coordinadora de Condefa consideró que es urgente el gobierno tome cartas en el asunto para facilitar la regularización de los vehículos ´chocolate´ en el estado.
“Dicen que es un delito traer un carro americano pero si no ofrecen la facilidad o no nos dan una regularización la gente va a seguir comprando carros y así vamos a andar de ´ilegales´, además de que la verdad sí es mucho más accesible porque la mayoría de la gente que vive aquí en San Luis tiene más la facilidad de poderse comprar un carro americano y de mejor calidad que aquí en México”, concluyó. @