La disputa por el nuevo estadio
A unos meses de que sea inaugurado el tan anticipado nuevo estadio de béisbol, se ha avivado la polémica entre quienes buscan concesionar el espacio a Los Algodoneros de San Luis para su comercialización, y el gobierno municipal que se mantiene firme en que será administrado como paramunicipal por un consejo con el fin de percibir ingresos para su mantenimiento.
Bibiana García Garza
SAN LUIS RIO COLORADO.- Con una capacidad para más de 3 mil 500 personas en una estructura de 22 mil metros cuadrados, la construcción del nuevo estadio de béisbol finalmente se encuentra en la última etapa y lista para convertirse, dentro de muy poco, en una infraestructura deportiva de primer nivel, obra en la que se han invertido más de 72 millones de pesos.
Esto ha generado gran expectativa en la población, en los empresarios, en el sector deportivo y entre los aficionados sanluisinos, sobre todo en lo que respecta a quién va a administrarlo y hacerse cargo de sus gastos de operación y mantenimiento que, sin duda, serán de alto costo.
Para el alcalde, Enrique Reina Lizárraga, concesionar el espacio no es una opción porque, sostiene, el edificio del estadio “no es un campo deportivo más”, sino una infraestructura de la ciudad que debe ser autosuficiente y no manejada por una sola persona sino por un Consejo, como se tiene previsto y fue estipulado en la Ley de Ingresos 2018.
La idea, plantea, es que el estadio -como parte de la infraestructura municipal-, sea manejado como una paramunicipal a través de un Consejo con el fin de generar un calendario de eventos.
Esto con la finalidad de que el edificio tenga vida durante todo el año y así capte ingresos importantes para su mantenimiento, tomando en cuenta que el estadio requiere continuar su ampliación hacia una segunda y una tercera etapa, recordó.
“El edificio del estadio no es un campo deportivo más, es una infraestructura de la ciudad como un teatro, un poliforum o un auditorio multiusos, no es hacer un estadio más y a ver quién juega, es una infraestructura pensada para que genere, primero que nada, un calendario de eventos con los que se perciban ingresos para su mantenimiento, que es muy costoso”, anotó.
Para efectos de generar esos ingresos, indicó, ya se ha contactado a personas de la Liga Mexicana del Pacífico, y de la Liga Mexicana del Verano, así como también posiblemente se pueda integrar la Liga Norte de México, si se llega a un acuerdo conveniente para ambas partes.
Con el Consejo se administraría el estadio como un bien de la ciudad, también con la finalidad de que se lleven a cabo muchos diferentes tipos de eventos y promoverlos, reiteró.
“Se tiene que administrar para que haya todo tipo de eventos y promoverlos porque no es campo deportivo más, si así fuera a lo mejor en uno o dos años, o en una temporada deportiva se acaba y no costó 5 pesos como para volverlo a hacer, entonces también se requiere de cuidados y de la atención que se le puede dar como paramunicipal”, puntualizó.
Todos esos detalles se han contemplado, dijo, desde el año 2013 que se gestionaron los recursos para su construcción, y es por eso que ya se ha contactado con los responsables de las ligas antes mencionadas con el fin de que no sólo haya eventos durante una sola temporada, sino que se extiendan durante todo el año.
Además, se tiene previsto y platicado junto con grupos deportivos de Arizona que en el estadio se lleven a cabo ´tryouts´, o juegos de exhibición de niños y jóvenes peloteros sanluisinos para recibir a visores de ligas americanas en San Luis Río Colorado, lo que abonará, aseguró, tanto a generar un calendario de eventos e ingresos como a convertir a la ciudad en un semillero de jugadores.
“La infraestructura del edificio tiene que ser aliciente e inspiración para todos los nuevos peloteros de San Luis; esto también te va a permitir que una infraestructura municipal tenga un calendario de actividades de muy buen nivel y que sea una distracción para los sanluisinos”, externó.
A su vez, subrayó, se seguirían generando los ingresos para que el municipio siga creciendo en cuanto a instalaciones dignas y de calidad tanto para eventos deportivos como de otra índole.
Desde un inicio se tiene que asegurar que la paramunicipal sea autosuficiente porque no contará con un presupuesto inicial de parte del gobierno, apuntó.
El objetivo, subrayó, es que el estadio genere ingreso y que no cueste.
Otra forma de generar utilidades es comercializar el nombre del estadio pues, a pesar de que se han propuesto ya varios nombres de jugadores famosos en la ciudad y en la región para el espacio deportivo, lo más viable es vender publicidad con el nombre y que cambie dependiendo de la empresa con la que se haga el contrato, estrategia comúnmente utilizada, señaló.
Acerca de la propuesta de Paco Ochoa, mencionó que no se han sentado a platicar con él, sin embargo, considera que no sería conveniente pensar que el nuevo estadio adquirirá el mismo modelo con el que se maneja actualmente el estadio ´Andrés Mena Montijo´, que ha sido sobre-utilizado por una gran cantidad de ligas y muestra signos claros de deterioro.
“No puede ser igual ni podemos pensar de esa manera, es una infraestructura que se tiene que cuidar y mantener para que cuando tengas algo programado realmente luzca con el nivel de infraestructura que tiene”, asentó.
Precisamente en lo que respecta a ese nivel, Reina Lizárraga confirmó también que en vez de pasto natural se instalará pasto sintético, un acondicionamiento que siempre es cuestionado pero que a la larga, dijo, ofrecerá al campo una mejor calidad, además de que es el que se utiliza en la gran mayoría de los estadios de ligas profesionales tanto en México como en Estados Unidos.
En cuanto al mantenimiento, admitió que será costoso como también lo fue gestionarlo y ejecutarlo por lo que es de vital importancia tener un buen control del mismo, que sería a través del mencionado Consejo que se encargaría de que funcione y genere para cubrir costos de energía, limpieza, personal y mantenimiento y así todos ganen, no sólo unos cuantos.
Estadio debe ser de Los Algodoneros: Paco Ochoa
En torno al tema, el presidente del Club Algodoneros de San Luis, Francisco ´Paco´ Ochoa Montaño, opina que la mejor opción del municipio es concesionarle el espacio para comercializarlo y así cubrir los gastos de operación y mantenimiento tanto del estadio como de su equipo.
Con ello, asegura, los Algodoneros se profesionalizarán y podrían generar mejores ingresos para beneficio del mismo estadio, esto es, al ofrecer espectáculos deportivos cada vez de mayor calidad.
Y es que al tener la facultad el equipo de administrar el inmueble, argumentó, no se le restaría autonomía al gobierno municipal, sino que se delegaría la responsabilidad mayor a Los Algodoneros.
“No tiene caso descubrir el agua tibia, yo le comenté al alcalde que se asesore en cómo le hacen en otras partes donde, en la experiencia que yo tengo, es el equipo profesional local el que maneja los estadios, por supuesto, con la autonomía del gobierno, no quiere decir que se lo den al equipo y ya no tenga nada que ver la ciudad”, expresó.
Así está concesionado el estadio de Mexicali y los de otras ciudades, refirió, por lo que en San Luis Río Colorado como club profesional no tendría por qué ser la excepción.
De esta manera, la aportación de los Algodoneros sería la de administrar el espacio y operarlo con todo y sus gastos de mantenimiento pues, si lo que se busca es que al equipo se le cobre por jugar sin permitirle comercializar por temporada, entonces el club no estaría en condiciones de participar en ningún juego.
“Algodoneros es un club profesional que cobra por jugar y percibe un ingreso, aparte de que el equipo tiene que comercializar todos los espacios publicitarios para mantenerse y poder mantener los precios accesibles a la gente entonces, si yo no pudiera comercializar nada en el estadio, no podría jugar ahí”, aseveró.
Es ilógico, agregó, que un patronato o un consejo maneje el estadio y que encima de todo le cobre una renta que el equipo no podría pagar porque es justo del dinero de la comercialización de donde se mantiene.
“Si me quitaran eso y aún me pidieran que tuviera que aportar algo para afrentar gastos, la verdad yo no puedo jugar y tendría que buscar otra alternativa o seguir jugando donde estoy porque, si tenemos que pagar para que haya juego de Algodoneros, no le vamos a entrar”, insistió.
En todo México, señaló, los gobiernos le aportan a los equipos porque un equipo profesional es una motivación para los jóvenes así como una válvula de escape para la sociedad, sin mencionar que ayuda a la comunidad a consolidar una identidad y un sentido de pertenencia la ciudad.
Aunado a ello, el béisbol profesional es costoso aunque, asegura, vale la pena invertir en él y en tener cada vez mejores jugadores con lo que genere el estadio, que igualmente serviría para cubrir los gastos operativos del estadio.
“Esto no quiere decir que voy a tratar de hacer un equipo económico y hacerme rico, y si así fuera no tuviera nada de malo, tengo años en esto, le he invertido mucho tiempo, dinero y esfuerzo y lo único que he ganado son satisfacciones, creo que para mí vale la pena seguir trabajando”, sentenció.
Es por eso que en su opinión, si él fuera el alcalde, le cedería toda la responsabilidad del estadio al equipo profesional para que se haga responsable de su comercialización todo el año y lo administre, quizás con la supervisión de algún patronato o consejo que esté al pendiente de que se esté haciendo todo lo necesario para mantener el campo en buenas condiciones.
“A lo mejor me estoy dando un balazo en el pie con una responsabilidad que a lo mejor está más allá de mis capacidades, sin embargo, así es como se maneja en todos lados, y si yo ahorita no tengo la capacidad de mantener un estadio de esos, tengo que actualizarme y crecer en capacidad para poder hacerlo”, prosiguió.
En el caso del estadio Andrés Mena, aceptó, no es un espacio en óptimas condiciones, aunque eso es porque son más de 20 ligas las que juegan y entrenan ahí todos los días pues no existen otros campos en la ciudad a dónde desfogar toda esa actividad.
Esto no pasaría con el nuevo estadio, aclaró, pues se dejaría solamente para eventos grandes de temporada y no para simples entrenamientos u otros usos menores que generarían más gastos.
De igual manera, refrendó, el Ayuntamiento seguiría teniendo la autoridad sobre el estadio pues sólo está delegando ciertas responsabilidades, y en caso de que necesite el inmueble puede utilizarlo para algún evento extraordinario.
Independientemente de sus opiniones, su intención es ver el lado positivo a las cosas y en caso de que el municipio considere que es mejor manejar el estadio a través de un patronato o consejo, externó, lo único que quiere es que dejen a los Algodoneros jugar ahí.
Eso sí, añadió, el equipo necesita de ayuda y no está en posibilidades de aportar en lo que respecta a recursos económicos directamente, pero sí en la mejor disposición de administrar el estadio y comercializar, o bien, trabajar junto con el mencionado consejo.
“Podemos trabajar juntos, pero me tienen que permitir que yo siga comercializando los espacios publicitarios porque esa es nuestra herramienta, nosotros nos mantenemos de la publicidad y si podemos seguir comercializando eso sí podríamos jugar ahí, pero si nos quieren cobrar renta no; nosotros queremos seguir haciendo beisbol”, concluyó. @