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No me arrepiento de nada: Enrique Reina

Rápido se fueron los tres años del 27 Ayuntamiento encabezado por el panista Enrique Reina Lizárraga. A una semana de que entregue la administración a Santos González Yescas, un viraje en el gobierno hacia la izquierda, el aún alcalde resume los avances en materia de infraestructura y nos habla de su futuro político. Le desea suerte a los que vienen pero advierte: “Estaremos vigilantes que no se detenga el crecimiento de la ciudad”.     

Humberto Melgoza Vega

En la recta final de su segundo mandato como presidente municipal de San Luis Río Colorado, el alcalde Enrique Reina Lizárraga se despide satisfecho de entregar una administración con finanzas sanas, con un ritmo de una obra por semana y el avance de otras tantas que deberá darles continuidad el gobierno que encabezará el morenista Santos González Yescas a partir del 16 de septiembre.

Con el sabor agridulce de la derrota electoral para su Partido Acción Nacional (PAN), que en San Luis cayó hasta el tercer lugar, por debajo del PRI, Enrique Reina se prepara para iniciar una nueva etapa en su vida, en la que por primera vez estará fuera de la administración pública y deberá emprender proyectos particulares, que le permitan mantener el nivel de vida al que está acostumbrado.

“Gracias a Dios mis padres nos enseñó a trabajar a mí y a mis hermanos, tengo una esposa muy trabajadora y unos hijos que les gusta innovar, crear, estoy seguro que habremos de hacer equipo  con todos ellos…”.

A propósito de familia, Reina dice que no tiene nada de que arrepentirse en esta su segunda etapa como alcalde (la primera fue de 2000 a 2003, llegó trepado en la “Ola Fox”), ni siquiera de haber dejado en la Dirección de Obras Públicas a su hermano Joel Reina, lo que dio paso a todo tipo de críticas, especialmente dentro del propio PAN, y muchas especulaciones.

“Al contrario, van a ser mil 095 días muy intensos… de lo que me podría arrepentir que hay muchos más proyectos e ideas y que el tiempo y los recursos no alcanzaron para llevarlos a cabo”, comenta.

En la entrevista exclusiva para CONTRASEÑA, la última con su investidura como alcalde, Enrique Reina defiende la actuación de su gobierno en el conflicto que se generó con un sector de la colonia Topahue por la falta de agua, conflicto generado, señala, por el ejido La Grullita, cuyo abogado Víctor Acosta será asesor jurídico en el 28 Ayuntamiento lo que de entrada representa un conflicto de interés.

“Habrá que ver lo que dice al respecto el nuevo gobierno, porque no se puede ser juez y parte”, precisó.

Y respecto a la polémica generada a raíz de la compra de varios vehículos para las dependencias, consideró que todo se debe a que desconocen el funcionamiento de la administración pública, y un poco por hacer grilla.

“Muchas de las personas que van a entrar al gobierno desconocen esta Ley de Disciplina Financiera que te obliga a ajustar el presupuesto en base a resultados… la planeación en el gasto desde 2016 nos permitió estar en condiciones para adquirir estos vehículo que serán usados por los nuevos funcionarios, no hay ningún despilfarro sino todo lo contrario”, aseguró.

Además de un “colchón” para que hagan frente a los gastos de fin de año, 27 millones de pesos que le corresponden a San Luis de los recursos del puente Río Colorado que estaban retenidos serán entregados a la próxima administración “si no nos tocó ejercerlos a nosotros qué bien que será para la siguiente administración, por eso no debemos ser mezquinos y decir que nadie es ganón porque le tocará gastarlos, esperamos que sean bien invertidos en bien de la ciudad”.

Estadios y humedales

Este domingo finalmente será inaugurado el estadio de beisbol en el Bosque de la Ciudad, obra que no estuvo exenta de polémica tanto porque casi se duplicó el presupuesto original junto con el tiempo para su conclusión. A pesar de que será una de las obras más importantes de su gobierno, en cuanto a inversión, Reina rechaza considerarla su “obra insignia”.

Se pone melancólico: “A lo mejor sí lo es, pero para muchas personas seguramente la obra más importante fue que les pavimentáramos su calle, que introdujéramos el servicio de drenaje como en Los Olivos o en el Islita, o que le pusiéramos unas lámparas de alumbrado público…”.

La obra del estadio de beisbol la gestionó en 2014 y fue incluida en el presupuesto del Ramo 23 con 70 millones de pesos, el proyecto original era con diseño de concreto, que no es recomendable para una zona sísmica como San Luis, al aumentar el coeficiente de seguridad con una estructura de acero, con los recursos del 2017 y 2018 se le agregaron 36 mdp para quedar en 106 millones de pesos, un inmueble con capacidad para 3 mil 771 personas sentadas.

Con esta entrega queda concluida la primera etapa del estadio, sólo faltaría el sistema de sonido, la segunda deberá incluir la construcción de palcos en la parte alta –el proyecto considera hasta el uso de elevadores–, y una tercera que incluya gradas detrás de la barda del fielder, “puedes llegar a una capacidad de hasta 12 mil espectadores y esto permitiría tranquilamente aspirar a un equipo que tenga interés de la Liga Mexicana del Pacífico o de la Liga Mexicana de Verano, que han estado muy pendientes…”.

Luego, reflexiona sobre la trascendencia del Humedal Cucapáh sobre todo en materia ambiental y en la recuperación de los mantos acuíferos, previendo los terribles efectos de una posible sequía para las próximas generaciones.

“Con mucha satisfacción escuché lo que nos dijo Pronatura que lo que se hizo con el humedal es el más grande en el noroeste del país donde ellos tienen presencia hecho por un gobierno municipal, algunos podrán decir que no es más que un charco de agua, pero tiene trascendencia, estamos trabajando con visión de futuro, devolviendo una tercera parte del agua que estamos extrayendo devolviéndola al subsuelo.

“Se habla que en unos 30 años habremos de tener sequías y temperaturas más elevadas, por eso la importancia”, apuntó.

Resalta que en donde más se invirtió fue en la prestación de los servicios básicos,223 millones de pesos para que a las familias no les faltara agua, energía y drenaje, incluida la famosa colonia Topahue.

“Contrario a lo que se dice, la Topahue fue la primer colonia que se atendió en febrero de 2016”, menciona. La parte que quedó fuera de donde se instalaron los servicios fue responsabilidad del ejido La Grulla, “son solo unas treinta familias donde no cumplió el ejido la Grulla el compromiso de reubicarlos en la Topahue o hacia el norte del canal, que son los que están batallando ahorita, el pasado 31 de agosto estuvimos citados y el ejido no llegó, ni envió a su abogado y la pospusieron para el 15 de octubre con el magistrado del Tribunal Agrario”.

Aunque ya no será alcalde “estaremos muy atentos de la función que hace el ejido y el gobierno, la comunidad debe saber que no es correcto ser juez y parte y no puedes hacer cosas que no te permita la ley…”.

Con el azote de la ola Morena que arrasó en todo el país, que capitalizaron el hartazgo social hacia los partidos de siempre y contra la corrupción,  se cree que pasarán largos años antes de que el PAN logre regresar a gobernar, pero Reina no está muy de acuerdo, considera que las expectativas que han generado son muy altas y ya están sufriendo el desgaste aun antes de asumir formalmente el poder.

“No todas las victorias ni todas las derrotas son para siempre”, reflexiona, “lo que tenemos que hacer como buenos mexicanos es hacer lo que mejor le convenga al país, estado o al municipio, y trabajar por ello”.

Antes de despedirse y agradecer la cobertura del medio de comunicación, Enrique Reina reconoce que no se retira de la política y que seguirá participando desde su nueva condición como miembro de la sociedad civil, “la política es algo que me apasiona, la vivo intensamente y lo seguiré haciendo desde cualquier trinchera…”.

Si esta trinchera será la dirigencia estatal del PAN, no está muy seguro. “Hay que hacer un análisis a fondo, veo que muchos levantan la mano y no veo ningún proyecto…”.

-¿Y tú lo tendrías?

-Yo no me he puesto a elaborar ningún proyecto, por eso no he levantado la mano.

“Hoy el Partido Acción Nacional tiene una gran oportunidad para convertirse en una oposición responsable y plantearse como una opción inteligente, congruente y creíble para recuperar la confianza de la ciudadanía”, finaliza.

 

 

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